Ahorrar y resolver las grandes pérdidas de energía por fallas de operación son las claves para dar tiempo al desarrollo de las energías renovables. El suministro de energía es, hoy por hoy, una de las preocupaciones más grandes de la humanidad, en cabeza de los gobiernos, y debería serlo para todas las personas en general. Rodolphe Demaine, CEO de EQUANS Colombia, multinacional especializada en multi-servicios energéticos, nos cuenta, desde su visión y su conocimiento experto, cómo ve el futuro de la energía en Colombia y el mundo.
¿Cómo se ve el futuro de la energía?
Actualmente tenemos una paradoja a nivel mundial, nunca tuvimos este nivel de desarrollo, y al mismo tiempo, nunca fuimos tan dependientes de la energía. El salto tecnológico y la continua mejora del acceso energético y tecnológico a la gente a nivel mundial -alrededor de 7 mil millones de habitantes- implican siempre más energía. Como humanidad estamos pasando por esta dificultad, porque no tenemos la capacidad de generar la energía para responder a esa necesidad. ‘’Esa es la triste realidad.’’
Sólo contamos con la energía que se produce en la actualidad y cuyas fuentes se están agotando, más la oportunidad de generar energías alternativas como las renovables. Pero la principal solución es ahorrar energía, utilizarla de forma austera, no se imaginan la cantidad de energía que se desperdicia o se pierde hoy en día. Y esto no se logra de forma individual, porque el mayor consumo es industrial o en sectores como el transporte, así que la energía se debe usar en lo indispensable, porque con el panorama actual, lamentablemente no va a alcanzar para todos.
¿Y cuál es el panorama de Colombia ante esta realidad?
Colombia tiene ventajas y desventajas. El 70% del consumo energético proviene del agua, lo que lo hace uno de los países más limpios del mundo. Un país que, sin embargo, debe cuidarse de serias amenazas, las reservas de agua han tendido a bajar un 1% por año, en los últimos 20 años, es una disminución del 20% del total de las reservas de agua en Colombia; la segunda es el cambio climático, que, al estar en el trópico, donde sequías como las generadas por el fenómeno de la niña son cada vez más fuertes, se pone en peligro la generación energética y si eso pasa, el país tendría que importar energía del exterior.
El gobierno busca impulsar las energías alternativas, pero eso no es suficiente, tendría que enfocarse en crecerlas cinco veces más para cubrir la matriz energética. Con las disminución de las reservas de petróleo, el país tiene una alta probabilidad de terminar orientándose al fracking lo que sería totalmente opuesto al discurso sobre las energías renovables y al gran potencial que tiene Colombia para desarrollarlas.
¿En dónde debería enfocar Colombia sus esfuerzos para optimizar energías limpias y evitar el uso de energías fósiles?
A pesar de los anuncios del gobierno a favor del desarrollo de las energías renovables, la realidad es que hay barreras que lo impiden como la legislación general, que protege a los operadores de red actuales, impidiendo que haya una oferta amplia, con grandes actores externos de energía renovable. A hoy, para un consumidor que quiera comprar paneles solares en su techo, no sería de fácil acceso y para las empresas resulta más complejo aún, dado que, el volumen y el ritmo de desarrollo de las energías renovables no es tan rápido como para que se integren.
Por otro lado, se presenta la pérdida de energía como reto, según nuestros datos internos en EQUANS, lo que se pierde de energía en un solo año, es equivalente a 10 años de desarrollo de las energías renovables, así que te das una idea de la magnitud de la diferencia. En lugares como la costa, tenemos cerca de 30% de pérdida por fallas operativas. En conclusión, si disminuimos la pérdida de energía sobre la red existente, no tendríamos por qué ir a buscar más energía, cuando finalmente la energía está ahí y la estamos perdiendo.
¿Qué factores generan esta pérdida de energía?
Hay varios factores cuándo se habla sobre pérdida energética: las fallas operativas, la vejez de la infraestructura, condiciones de salinidad, las zonas montañosas que demandan distancias largas entre postes donde hay pérdida, entre otros. Sin embargo, una de las mayores problemáticas que encontramos es el robo de energía, en particular en las zonas como el Caribe. En consecuencia, las zonas donde hay robos de energía carecen de inversión para dar una energía estable y la gente alrededor que opta por robar, se encuentra con una energía que no les permite su desarrollo ni el fomento activo de empresas o fábricas porque no pueden operar con cortes de energía, dos o tres veces por día.
¿Y la medición energética inteligente, tiene alguna contribución en todo esto?
Sin duda, la decisión de implementarlos está tomada en Colombia y esta se ve impulsada directamente por Grupo ENEL quienes esperan cambiar un 60% de los medidores de Bogotá y alrededores en un periodo de menos de tres años. Un paso grande hacia el desarrollo, puesto que está bajo la mirada del país, y una visión ligada a la medición inteligente que hace más fácil el control de pérdidas, la operatividad, la eficiencia en picos de voltaje, y por ende, regular toda una red con millones de usuarios.
Como dato relevante de EQUANS, sabemos que la pérdida a nivel nacional está entre 16% y 18%, en comparación con Europa que tiene apenas 3% o Chile y Perú con 10%. Este es el primer desafío que tenemos ahora mismo y sabemos que la medición inteligente va a ayudar mucho en ese sentido.
¿Qué hace EQUANS para mejorar y optimizar el futuro de la energía en Colombia?
Somos el primer actor en control de pérdida en el país y nos respaldan clientes como ENEL, para quienes garantizamos la disminución de pérdida energética a nivel nacional y la instalación y mantenimiento de infraestructuras en zonas urbanas, rurales, de post-conflicto, de base DIESEL o sin energía. Adicionalmente, estamos muy comprometidos con el impulso de las soluciones de medición inteligente, calibración y revisión de medidores de energía eléctrica en laboratorios acreditados por el ONAC, proyectos de eficiencia energética y reducción de pérdidas.
Sabemos que somos un actor relevante, tenemos aspiraciones claras para buscar y ofrecer soluciones más drásticas, con el objetivo de evitar esa pérdida de energía en Colombia. A todo esto se suma nuestro amplio conocimiento global sobre la implementación de energías renovables.