El Senado abre el segundo día de ‘impeachment’ acusando a Trump de “incitador en jefe” del ataque

El principal portavoz de la acusación contra Donald Trump, el representante demócrata por Maryland Jamie Raskin, ha abierto la segunda sesión del juicio político contra el expresidente acusándole de ser el “incitador en jefe” de los disturbios del pasado 6 de enero y descartando que fuera un “espectador inocente”.

“Las evidencias les mostrarán que el expresidente Trump no fue un espectador inocente”, ha dicho Raskin, para quien el antiguo inquilino de la Casa Blanca “renunció a su papel de comandante en jefe y se convirtió en el incitador en jefe de una peligrosa insurrección”.

“Lo vio en la televisión como un ‘reality show’. Se deleitó con él”, ha asegurado Raskin, para quien hubo “método en la locura ese día” y en el cual Donald Trump “no hizo nada”, salvo “enviar tuits que solo incitaron aún más a una multitud desenfrenada”.

El segundo día de ‘impeachment’ contra Donald Trump en el Senado ha empezado tal y como comenzó la jornada anterior, con un vídeo mostrado por la acusación, demócrata, aunque en esta ocasión con “imágenes inéditas” de la turba asaltando las oficinas y el interior de las instalaciones del Capitolio.

Raskin también ha utilizado su intervención para intentar desmontar la defensa de Donald Trump del día anterior, cuando sus abogados apelaron a la Primera Enmienda de la Constitución de Estados Unidos y a la libertad de expresión.

“No se puede gritar fuego en un teatro lleno de gente”, ha dicho Raskin parafraseando la famosa frase del que fuera juez del Tribunal Supremo Oliver Wendell Holmes. Aunque, dice, “este caso es mucho peor que el de alguien que grita falsamente fuego en un teatro lleno de gente”.

“Es más como un caso en el que el jefe de bomberos de la ciudad, a quien se le paga para apagar incendios, envía a una multitud a prender fuego al teatro y cuando las alarmas de incendio se activan no hace nada más que sentarse, alentar a la multitud a continuar su alboroto y ver cómo se propaga el fuego en la televisión con regocijo y deleite”, ha ilustrado Raskin.

“No se puede ir con la Policía y apoyar a los ladrones”, ha insistido en esta ocasión tomando una cita del juez conservador del Supremo Antonin Scalia, fallecido en 2016. “Si se convierte en el incitador en jefe de la insurrección, no puede esperar estar en la nómina como comandante en jefe de la unión” ha vuelto a subrayar.

Las tres frases más repetidas de Trump en vísperas del ataque

El representante demócrata por Colorado, Joe Neguse, otro de los encargados de presentar las pruebas acusatorias contra Trump, ha mostrado una recopilación de las tres frases que más repitió el expresidente durante los días previos al asalto al Capitolio, argumentando que dicha retórica jaleó a sus partidarios.

“Las palabras del presidente Trump en ese discurso del 6 de enero, al igual que las acciones de la turba, fueron elegidas cuidadosamente. Esas palabras tenían un significado muy específico para esa multitud”, ha explicado.

“Las semanas previas, durante y después de las elecciones, usó las mismas palabras una y otra vez. Escucharán una y otra vez tres cosas, la gran mentira, paren el robo y lucha como el diablo para detener el fraude”, ha enumerado

“Les pido respetuosamente que recuerden esas tres frases mientras consideran las evidencias hoy”, ha solicitado Neguse a los senadores, antes dar posteriormente a un vídeo en el que uno de los alborotadores del 6 de enero afirmaba seguir órdenes del expresidente Trump.

La turba pretendía “ejecutar” a Mike Pence

La sesión de este miércoles ha estado ilustrada con varios vídeos y audios de lo sucedido aquel día 6 de enero, en uno de los cuales, según ha comentado la representante Stacy Plaskett, se observa como la turba pretendía “ejecutar” al exvicepresidente Mike Pence, según “informaron los periodistas del Capitolio”.

“Durante el asalto al Capitolio, los extremistas presuntamente se coordinaron y discutieron sobre cómo podrían perseguir al vicepresidente. Los periodistas en el Capitolio informaron de que les escucharon decir que estaban buscando a Pence para ejecutarlo”, ha dicho Plaskett mientras mostraba las imágenes.

“Cuando los alborotadores llegaron a la parte superior de las escaleras, estaban a menos de 30 metros de donde se refugiaba el vicepresidente con su familia, y estaban a solo unos metros de una de las puertas de esta cámara”, ha apuntado.

En uno de los videos mostrados se escucha como una parte de la exaltada multitud que intentaba irrumpir en el Capitolio coreaba ‘colguemos a Mike Pence’, quien, ha recordado Plaskett, se negó a revocar los resultados de las elecciones, por lo que “no es de extrañar que fuera el blanco de las iras”.

Otra de las imágenes que ha mostrado Plaskett es la ya famosa fotografía de Richard Barnett, el tipo que se acomodó en la silla del despacho de la presidenta de la Cámara de Representantes, Nancy Pelosi, y puso los pies sobre su escritorio, destacando que portaba una pistola paralizante, tal y como señaló posteriormente el FBI.

El martes dio inicio el segundo juicio político al que Trump se enfrenta en apenas un año, con la aprobación de la constitucionalidad del mismo con al apoyo de hasta seis congresistas republicanos, entre ellos Lisa Murkowski de Alaska, Susan Collins de Maine, Mitt Romney de Utah o Pat Toomey de Pensilvania.

A pesar de los seis republicanos que han votado a favor de la constitucionalidad del ‘impeachment’, la cifra de 67 senadores que necesitan los demócratas para, en efecto, condenar al expresidente Trump todavía queda muy lejos, ya que deberían ser 17 los republicanos que votaran a favor.

Los disturbios dejaron cinco muertos, incluido un oficial de policía del Capitolio. Otros dos agentes murieron por suicidio en las semanas posteriores a la violencia. Por estos hechos, se ha presentado el juicio político contra Trump por un único artículo por incitación a la insurrección.