Las autoridades de las principales ciudades estadounidenses se preparan ya para una nueva jornada de protestas por la muerte del afroamericano George Floyd después de que el viernes las manifestaciones terminaran con graves disturbios.
En Minesota, donde comenzaron las protestas por ser donde murió Floyd durante una detención policial, líderes comunitarios y religiosos han pedido a la gente que se quede en sus casas y que cumplan con el toque de queda anunciado por el gobernador Tim Walz y que cubre desde las 20.00 a las 6.00 horas.
“Jóvenes, por favor. Por favor. Quédense en casa esta noche”, ha afirmado Clarence Castile, cuyo sobrino, Philando, murió por una acción policial en 2016. “No permitan que el bien se traduzca en malas palabras. No permitan que distorsionen el mensaje. Cumplan el toque de queda”, ha afirmado el presidente de la Stairstep Foundation, Alfred Babington-Johnson.
También el alcalde de Cincinnati, John Cranley, ha anunciado un toque de queda de 22.00 a 6.00 horas tras los disturbios del viernes. Cranley ha destacado que la mayoría de los manifestantes actuaron de forma pacífica, pero un pequeño grupo causó “muchos daños” en comercios y propiedades.
En Cleveland las protestas ya han comenzado, pero la Policía ha intervenido para dispersar a quienes estaban “lanzando objetos”, segun recoge la CNN. La manifestación comenzó de forma pacífica, pero después se ordenó dispersar.
En Austin, Texas, los manifestantes han cortado “completamente” la Autopista Interestatal 35 en ambas direcciones, según ha informado la autoridad de movilidad de la ciudad en Twitter. Mientras, el gobernador de Texas, Greg Abbott, ha enviado más de 1.500 agentes a Houston, Dallas, San Antonio y Austin.
Y el gobernador de Indiana, Eric J. Holcomb, ha ordenado a la policía estatal apoyar a las policías locales “para garantizar la seguridad y propiedad de nuestros ciudadanos” tras las protestas del viernes en Indianápolis. “La violencia y el vandalismo nos aleja de nuestro deseo común de resolver las diferencias. Seamos todos parte de la solución de nuevo”, ha apuntado Holcomb.
Por su parte, en Wisconsin la Guardia Nacional está activa para desplegarse en Milwaukee por orden del gobernador, Tony Evers, quien ha alertado de “agitadores que han perjudicado a los manifestantes pacíficos tras el asesinato de George Floyd”.
Mientras, el presidente estadounidense, Donald Trump, ha pedido a los “gobernadores y alcaldes liberales” que sean “mucho más duros” con las protestas “o el Gobierno federal intervendrá y hará lo que hay que hacer, y eso incluye el uso del poder ilimitado de nuestro Ejército y muchos arrestos”. “¡Cruzar las fronteras estatales para incitar a la violencia es un CRIMEN FEDERAL!”, ha advertido Trump en Twitter.
La muerte esta semana de George Floyd tras pasarse casi nueve minutos con su cuello aprisionado por la rodilla del agente de Policía Derek Chauvin ha desatado protestas, disturbios y saqueos en la ciudad más poblada del estado de Minesota, ahora bajo estado de emergencia.
A lo largo de la pasada noche se han registrado protestas y disturbios en una treintena de ciudades del país, que se han saldado con dos muertos — un joven de 19 años en Detroit y un agente federal en Oakland, donde ha resultado herido de bala un compañero suyo — y cientos de detenidos.