El Parlamento de Reino Unido ha aprobado este martes reintroducir el uso obligatorio de la mascarilla en transporte público y tiendas de Inglaterra, en el marco de un recrudecimiento de la situación de la pandemia en el país europeo y ante las preocupaciones que plantea la variante ómicron del SARS-CoV-2.
La medida, que han salido adelante con 434 votos a favor y 23 en contra –un apoyo masivo al Gobierno británico que ha incluido al Partido Laborista–, entrará en vigor a las 05.00 horas, según ha recogido la BBC. Reino Unido suprimió el uso obligatorio de mascarilla, y el resto de las restricciones impuestas por la pandemia, el 19 de julio.
La votación ha concluido mientras el ‘premier’ británico, Boris Johnson, comenzaba una rueda de prensa para abordar la situación de la pandemia en Reino Unido. Durante su intervención, ha asegurado que el “objetivo” del Gobierno es ofrecer una dosis de refuerzo de la vacuna contra la COVID-19 a toda la población diana –los mayores de 18 años– para finales de enero. En este sentido, ha precisado que las autoridades priorizarán a los ancianos y a las personas más vulnerables, igual que con las dosis anteriores.
Johnson ha incidido en que “la mejor defensa” contra la nueva variante ómicron es “vacunarse y recibir la dosis de refuerzo”, ha informado la cadena Sky News. Por ello, ha garantizado que los centros temporales de vacunación contra la COVID-19 “emergerán como árboles de Navidad” y ha detallado que personal militar y voluntarios colaborarán para acelerar la inmunización.
El primer ministro ha reconocido que la población pueda experimentar “un sentimiento de agotamiento” en lo que a la pandemia se refiere, más con la aparición de ómicron, pero ha defendido que la situación es “inconmesurablemente mejor” que hace un año.