La investidura sigue su guión una vez los socialistas han amarrado los apoyos de los independentismos -ERC y EH Bildu- a que Pedro Sánchez sea el presidente del Gobierno de España en la legislatura que está empezando. Como estaba previsto, el candidato del PSOE no ha logrado la mayoría absoluta necesaria para que prospere su nombramiento en la primera votación, pero lo tiene hecho para que el martes, en 48 horas, sí lo haga por mayoría simple, echando a andar el primer gobierno de coalición de la democracia española.
Finalmente, con la baja prevista de una diputada de Unidas Podemos (que no fallará el 7 de enero), el resultado de la votación celebrada esta mañana, ha sido el de 166’síes’, 165 ‘noes’ y 18 abstenciones. Lo cual indica que la futura victoria de Sánchez será muy ajustada. Todo ello en un domingo que ha recogido una segunda mitad de sesión todavía más bronca que la de este sábado, y en la que EH Bildu ha tenido un rol protagonista.
Y es que durante su intervención, la portavoz ‘abertzale’, criticó el discurso del Rey Felipe VI tras el referéndum ilegal de Cataluña. Ello ha provocado numerosos reproches desde la bancada de la derecha, donde se encuentran ubicados el PP, Vox y Ciudadanos, cuyos diputados han comenzado a interrumpir a la dirigente de Bildu. Enseguida, se le ha dirigido un “asesinos” desde los escaños de la derecha del hemiciclo e incluso también se ha podido escuchar un “Viva el Rey”.
El primer calificativo no ha pasado desapercibido para la presidenta del Congreso, Meritxell Batet, que ha tenido que intervenir en diversas ocasiones para pedir a sus señorías que guardaran silencio y que respetaran a la diputada que estaba en uso de la palabra.
Encender la hoguera
A continuación, Adriana Lastra mantuvo este fuego vivo. La portavoz socialista reprochó a los diputados de la derecha sus posturas en el campo de la violencia de género y agradeció a los futuros socios de investidura que se hayan mantenido firmes a pesar de las “presiones” que habrían recibido. “La democracia se abre paso. Los socialistas no queremos vivir de la crisis territorial, sino en una España diversa y plural. Siempre diálogo. Ya hemos hecho lo más difícil. Hemos abierto el camino y el éxito de esta investidura es la prueba de que podemos entendernos”.
Mientras, Pedro Sánchez, en su intervención final, indicó que el debate era un reflejo de lo que iba a ocurrir en esta legislatura en la Cámara Baja: “La coalición del progreso contra la coalición del apocalipsis”. Y ha pedido a los suyos, el PSOE, y Unidas Podemos que ante este escenario sean un ejemplo de “moderación y progreso”.