El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, se mostró el martes contrario a usar informantes de la CIA para espiar al líder norcoreano Kim Jong Un, diciendo que no pasaría mientras esté a cargo, lo que podría privar a los servicios de inteligencia de una valiosa herramienta.
Los comentarios de Trump a periodistas en un prado de la Casa Blanca representaron un nuevo intento del presidente para congraciarse con el líder norcoreano, una política que ha generado críticas por pasar por alto el carácter autocrático de Kim.
Trump habló un día después de que el diario Wall Street Journal informó que el medio hermano de Kim, Kim Jong Nam, al que mataron en el aeropuerto de Kuala Lumpur en 2017, era una fuente de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA).
“Vi la información sobre la CIA respecto de su hermano, o medio hermano, y le diría que eso no sucedería bajo mis auspicios, eso es seguro. No permitiría que eso sucediera bajo mis auspicios”, afirmó Trump.
La CIA no hizo comentarios inmediatamente sobre las declaraciones.
Washington está tratando retomar conversaciones estancadas con Pyongyang, con el objetivo de lograr que Corea del Norte desmantele su programa de armas nucleares. Trump y Kim se reunieron por última vez a principios de este año en Hanói, pero no lograron un acuerdo de desnuclearización.
Trump elogió lo que llamó una carta “hermosa” que recibió de Kim. “Creo que va a pasar algo que va a ser muy positivo”, comentó, sin dar detalles.