Tras la derrota electoral de los candidatos a la Alcaldía de Bogotá Miguel Uribe Turbay y Hollman Morris, se encuentra la confirmación del voto libre de la mayoría de bogotanos que eligieron un nuevo mandatario, más allá de los respaldos políticos que a sus candidatos brindaron el expresidente Álvaro Uribe y el senador Gustavo Petro, quienes quedaron como los grandes perdedores en la capital del país.
Estos dos líderes políticos nacionales le apostaron cada uno a un candidato, que lamentablemente para ellos, quedaron en los últimos lugares de votación para Alcalde de Bogotá.
El triunfo de Claudia López y el segundo lugar en la votación de Carlos Fernando Galán, ratifican que el voto con los que los bogotanos eligen a su alcalde, se da, sin que necesariamente medie el apoyo o respaldo de un político o partido fuerte en el nivel nacional, y que poco les importa quién sea el que ellos digan.
Queda también claro que los ciudadanos en Bogotá desean que se supere la polarización que existe entre dos modelos de ciudad, y que más bien le apuesta por la continuidad de los planes y proyectos que consideran vitales para la capital, como por ejemplo, la construcción del metro, mejoramiento de la infraestructura del TransMilenio, más y mejor inversión en educación, salud, vivienda, etc.
El poco respaldo electoral que obtuvo Miguel Uribe Turbay, demostró que el respaldo de los partidos Liberal, Conservador, Mira y Centro Democrático y el del expresidente Álvaro Uribe, poco les importa a los ciudadanos bogotanos, y más bien parecen haberse convertido en el coco para una candidatura a la Alcaldía de Bogotá.
En el caso de Hollman Morris los ciudadanos confirmaron su decisión por la continuidad de proyectos vitales para la movilidad como lo es el metro, evitando que este sea reversado, producto de un radicalismo ideológico, además, del temor de regresar a la fuerte polarización que se presentó en la capital durante la Administración de Gustavo Petro.
La jornada electoral deja como ganadora a Claudia López, con el voto independiente y a Gustavo Petro y Álvaro Uribe como los grandes perdedores.