La Corte Suprema de Justicia declaró improcedente la recusación interpuesta por el apoderado del senador Iván Cepeda Castro contra el fiscal general de la Nación, Francisco Barbosa Delgado.
El alto tribunal rechazó la recusación argumentando que no se pueden trasladar al ámbito judicial las controversias de tipo político que sostengan las partes en conflicto.
“Cuando un funcionario es recusado, señala la Sala Plena, la competencia se reduce a verificar si está incurso en alguna de las causales taxativas previstas expresamente en el ordenamiento jurídico”.
La providencia subraya que los argumentos presentados en la recusación contra el Fiscal General son insuficientes, porque “no corresponden a una de las causales prevista en el ordenamiento jurídico” y “porque varios de ellos están orientados a cuestionar a otros servidores públicos y activistas políticos, lo que, en principio, escapa a la competencia de la Corte Suprema de Justicia. La conexión de esos supuestos comportamientos con el asunto sometido a conocimiento de la Corporación se explica en la influencia que esos terceros pudieran tener en el funcionario recusado”.
Sobre el cuestionamiento que hace el senador Iván Cepeda al fiscal Barbosa por su participación en la última campaña presidencial, la Corte precisa que, “no se advierte que esa participación sea suficiente para evitar que el funcionario recusado pueda ajustar su comportamiento al ordenamiento jurídico, máxime si se tiene en cuenta que el investigado no es el entonces candidato presidencial, sino otro miembro del respectivo partido político”.
Por último al consideró que la posición de jerarquía que ejerce el Fiscal General de la Nación está claramente definida por la Constitución, el alto tribunal descartó posibles intromisiones en el curso del proceso.