El próximo martes de 26 de noviembre se llevará a cabo la elección del Director General de la Corporación Autónoma Regional de Cundinamarca (CAR), para el periodo 2020-2023, y desde ya se han encendido las alarmas por la posible reelección de Néstor Franco, que busca repetir periodo en esa entidad pese a tener una sanción en primera instancia de la Procuraduría General de la Nación.
Franco, que en un principio había manifestado su desinterés en el proceso de reelección, suena fuerte para quedarse en el cargo, a pesar de haber sido destituido e inhabilitado por la Procuraduría para ejercer cargos públicos durante diez años, por irregularidades en la construcción de la Planta de Tratamiento de Aguas Residuales del municipio de Chía – PTAR II-.
De acuerdo con el Ministerio Público, el convenio suscrito por la CAR con la Empresa de Servicios Públicos de Chía (Emserchía) y la Alcaldía del municipio, por más de $35.000 millones, no se encontraba en condiciones de ser ejecutado.
“Los estudios y diseños planteados no eran suficientes ni estaban actualizados y completos para ejecutar el proyecto, lo que llevó a retrasos en la ejecución de las obras y a un reajuste en el valor, que ascendió a $62.876 millones”, señaló en su momento la Procuraduría.
Para el Órgano de Control, esa situación debió preverse antes de la firma del convenio, en 2015, en razón a que las normas que rigen los procesos contractuales deben cumplirse con estricto rigor, pues es la forma de garantizar el cumplimiento del interés general que constituye la finalidad de todo proceso de contratación, y así evitar retrasos en las obras o adiciones en el valor de las mismas.
Ante esta situación, desde diferentes sectores le están pidiendo al Procurador General, Fernando Carrillo Flórez que intervenga en este caso y definir de fondo, la situación disciplinaria de Franco, Además, instan al jefe del Ministerio Público a solicitar el aplazamiento de la elección del nuevo director de la CAR.
César Carrillo, otro opcionado que genera dudas
El otro nombre que suena esta semana para quedarse con la dirección de la CAR es el de César Augusto Carrillo, de quien se dice, sería el candidato del saliente gobernador de Cundinamarca, Jorge Rey; y “as bajo la manga” del propio Néstor Franco.
Carrillo fue secretario de Planeación de Cundinamarca, y sobre él recae un manto de dudas, por cuenta de un video que se conoció en el mes de octubre donde varios funcionarios de esa entidad manifiestan su agrado y deseo para que él llegue a la dirección de la CAR.
Sobre ese episodio, Carrillo aseguró que había sido invitado por parte de unos periodistas a un reconocimiento, no a un evento político.
Además, tiene señalamientos de presunta participación en política con delegados de varias ONG y consejeros de la CAR.