La comisión primera de la Cámara aprobó la iniciativa que busca que las personas casadas ejerzan libremente su voluntad de divorciarse sin que el Estado se inmiscuya en su intimidad ni juzguen su comportamiento.
Actualmente, el proceso de divorcio es un trámite que se vuelve tortuoso ante un juez para demostrar que si cumplen una de las nueve causales que contempla el ordenamiento jurídico colombiano.
Según la Representante a la cámara Katherine Miranda autora del proyecto se busca que la sola voluntad de una de las partes sea suficiente para iniciar el proceso de divorcio sin tener que acudir a otras razones, algo que no está contemplado hoy en el ordenamiento jurídico colombiano.
Esta propuesta de divorcio deberá incluir obligaciones alimentarias entre los cónyuges, la liquidación de la sociedad conyugal, la contribución de los padres a crianza, educación y la obligación alimentaria de sus hijos e hijas, su custodia y cuidado, régimen de visitas y su periodicidad, etc.
Es decir, el proceso haría más énfasis en las obligaciones que tendrá cada persona hacia adelante y no tanto en las causas que llevaron al divorcio, como ocurre hoy en día.
Este proyecto continuará su trámite legislativo para convertirse en una ley de la república.