Wilson Arias, senador del Polo Democrático Alternativo y ponente del Plan Nacional de Desarrollo, habla en entrevista con Óscar Sevillano para Confidencial Colombia, y explica sus preocupaciones en lo que tiene que ver con el manejo de regalías, y va más allá denunciando un posible mico que, según él, beneficia al banquero Luis Carlos Sarmiento Angulo.
Confidencial Colombia: ¿Cuál es la razón para presentar ponencia negativa la Plan Nacional de Desarrollo?
Wilson Arias: He revisado la propuesta de Plan Nacional de Desarrollo del Gobierno de Iván Duque, y luego de un riguroso análisis puedo decir con firmeza, que es inconveniente para el país, porque profundiza el estractivismo, flexibilizando las licencias a la industria petrolera, en momentos en que el país ve en riesgo sus ríos y montañas.
C.C: Dice usted que el Plan Nacional de Desarrollo golpea a la clase vulnerable, ¿Cuál es el argumento para tal afirmación?
W.A: Porque junta a las personas que tiene ingresos mensuales de 450 mil pesos al mes, con la clase media consolidada. Todos sabemos que en un país donde se tiene una población donde más del 70% se encuentra en el sector informal, no puede ser de clase media. Considerar esto bajo el argumento de que estas personas cotizan al sistema de seguridad social no es válido, porque en este grupo puede estar el taxista, el vendedor ambulante, la empleada del servicio doméstico, etc.
C.C: Volver a la discusión de los niveles mínimos que debe tener una familia para que entren en la categoría de clase media, ¿no cree que es absurdo? Se hizo en el Gobierno Santos con la oposición del entonces vicepresidente Angelino Garzón y ya vimos en quedó.
W.A: En efecto. Esto demuestra que este Gobierno es continuista y profundizador de algunos temas. El concepto de equidad, para ellos está regulado por el mercado y desde hace 30 años venimos así, y por esto, el país llegó a ser el segundo más desigual de América Latina y el séptimo más desigual del mundo. Audacia la del DANE, que pretende calificar a las personas con estos ingresos como clase media. Llegaron a proponer incluso un monto de 250 mil pesos al mes para que esto fuera posible.
C.C: ¿Cuál podría ser el fin para considerar esta idea?
W.A: Desde mi punto de vista es reducir las políticas de lucha contra la pobreza, dejándolas en su mínima expresión, disfrazando de clase media a la población vulnerable, y así quitar los subsidios a los servicios públicos, convirtiéndola en fuente de ingreso. Es muy dirigido a los monopolios y del sector financiero especialmente.
C.C: Usted habla de un posible mico en el Plan Nacional de Desarrollo, háblenos de este.
W.A: En el artículo 178, que reglamenta las regalías que tienen que pagar quienes hacen explotación minera en predios de reconocimiento de propiedad privada, se había prometido recuperar lo que debía pagar el señor Luis Carlos Sarmiento Angulo, me refiero a las formas de tenencia del suelo que le permite tener además el subsuelo. En esas propiedades donde se explota la plata, el platino, etc., este empresario paga el 4% del sector minero y según la propuesta, pasaría al 0,4%. ¿Cuánto se ha ahorrado este señor en 17 años?: más de 100 mil millones de pesos. Estas compañías son Mineros S. A. y de Scotibank. Este proyecto recuperaba la tarifa que Sarmiento debía pagar y el jueves en la noche desapareció y cuelgan un mico disminuyéndola.
C.C: Quienes defienden la idea de rebajar la carga impositiva privadas, lo hacen asegurando que esta tiene un fin y es aumentar la inversión, y que esta a su vez beneficie el número de empleos.
W.A: Aquí no hay espacio para la especulación. No necesitamos adivinar lo que va a pasar. Revisemos lo que ha ocurrido en los últimos 17 años con las gabelas que se han otorgado al sector financiero, al sector minero y a la industria extractiva, por ejemplo. Hay sentencias del Consejo de Estado que revelan el detrimento patrimonial, y donde queda claro que no deberían rebajarse las regalías a los dueños de las empresas del sector extractivo, porque estas no están en función del tipo de propiedad, sino en función del tipo de explotación. De hecho, el 4% es bastante escaso. Los resultados en Bolivia de la elevación a la tarifa al sector extractivo han sido excelentes, dignas de estudiar.
C.C: El Plan propone modificaciones a la Dirección Nacional de Planeación, ¿Qué alternativas propone usted en su ponencia?
W.A: Todos estamos caminando con mucho cuidado para intentar leer lo que se quiere hacer. Ha habido distintos movimientos en esta materia durante los últimos Gobiernos. Las últimas buscan privar de algunas funciones a Planeación Nacional y dejarlas en cabezas del ministerio de Hacienda. Pareciera ser que se sigue una recomendación del Banco Mundial para crear una especie de súper autoridad económica, que esté fuera del alcance del control político.
C.C: Cómo está hoy el Plan Nacional de Desarrollo, ¿considera que este le apuesta a un Pacto por la Equidad?
W.A: Mi gran debate ha sido precisamente la lucha por la equidad. Este debate está muy vinculado al debate de la justicia social. Treinta años de neoliberalismo nos enseñan que este no es el camino. No necesitamos adivinar el futuro, sino revisar lo que ha ocurrido con estas políticas.