Grupo de Lima descarta las armas para tumbar a Maduro, de momento le apuesta a la diplomacia


El Grupo de Lima que sesionó este lunes en Bogotá, con la presencia del diputado Juan Guaidó, autoproclamado presidente interino de Venezuela y reconocido como tal por medio centenar de países; descartó el uso de la fuerza para sacar a Nicolás Maduro del poder.

En un comunicado de diez puntos que será presentado al final de la sesión, la instancia multilateral excluye explícitamente el uso de la fuerza y opta por la diplomacia para cerrarle el cerco a Maduro.

Por un lado, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, que también asistió a la sesión de este lunes; exigió a los países de América Latina congelar los activos petroleros estatales de Venezuela.

“No puede haber espectadores en Venezuela. Tras la brutalidad que el mundo vio el sábado, los instamos a reconsiderar el apoyo al tirano. Únanse al pueblo venezolano y retiren el respaldo al régimen de Maduro”, indicó Pence.

Entretanto, el presidente de Colombia, Iván Duque, enfatizó que “para nadie es una mentira que lo que existe en Venezuela es una dictadura oprobiosa”, razón por la cual “el Grupo de Lima se ha constituido para denunciar esos atropellos, pero también para tomar las acciones requeridas”.

“La situación que vive Venezuela no es, como lo quieren plantear desde las expresiones de la propaganda de la dictadura, como un dilema entre guerra y paz. No. Hoy estamos acá porque el verdadero dilema es la continuación de la tiranía o el triunfo contundente de la democracia, el triunfo de los derechos humanos, el triunfo de las libertades”, sostuvo.

Por su parte, el autoproclamado presidente Juan Guaidó, pidió no abrir espacios a Nicolás Maduro, porque -a su juicio- hacerlo pondría bajo amenaza al continente.

“Es importante recuperar la democracia en Venezuela porque quienes hoy usurpan el poder amenazan la estabilidad del continente (…) Ser permisivos con la usurpación de poder sería una amenaza para toda América”, dijo Guaidó.