La empresa Dan-Bunkering, que opera en Colombia con la compañía Australian Bunkers en los puertos de Cartagena y Buenaventura, participando en el mercado de tratamiento y suministro de combustible, enfrenta un proceso judicial a nivel internacional por supuesta triangulación del producto que en principio se vendería a aviones a empresas rusas y que estarían terminando en Siria.
La venta de combustibles a Siria ha sido cuestionada por la Unión Europea, quien prohibió esta actividad para aeronaves de este país en 2014, porque este elemento estaría siendo utilizado para “ataques aéreos contra civiles”.
En un comunicado, la Fiscalía del Estado para Delitos Económicos Graves y Delitos Internacionales ha precisado que la compañía, Dan Bunkering, y su subsidiaria, Bunker Holding, vendieron 172.000 toneladas de combustible a aviones rusos en 33 ocasiones entre 2015 y 2017. Las operaciones se saldaron con un valor de alrededor de 647 millones de coronas danesas (casi 87 millones de euros).
“Nuestra evaluación es que los acuerdos con las empresas rusas son una violación de las sanciones de la UE”, ha señalado el fiscal en funciones de la Fiscalía especializada, Per Fiig, que ha calificado el caso de “grave”.
La emisora danesa DR informó en abril de 2019 sobre el caso, citando documentos confidenciales y fuentes gubernamentales. De acuerdo con DR, una empresa rusa que representaba al Ejército ruso compró el combustible, que llegó a Siria a través del Mediterráneo en petroleros rusos.
Al respecto Estados Unidos también se ha pronunciado, sancionando a empresas rusas por vender “millones de barriles de petróleo” a Siria, con los que se estaría beneficiando a los grupos Hamás y Hizbulá.
A través de un comunicado, Dan-Bunkering respondió, a través de un comunicado, que: “nos sorprende que se haya optado por presentar estos cargos. Nuestras propias investigaciones internas exhaustivas no han revelado signos de que nadie dentro de Bunker Holding o Dan-Bunkering tuviera conocimiento de las presuntas infracciones de las sanciones de la UE”.
En Colombia la compañía Australian Bunkers, estuvo en el ojo del huracán por hacer parte del grupo de empresas investigadas por el supuesto robo de combustibles a Ecopetrol en la modalidad de la extracción ilegal de petróleo y gasolina, mediante la instalación de válvulas alternas a los oleoductos y poliductos que llevan el crudo.
Con información de Europa Press