Proyecto de reforma a la Policía: de la protesta a la propuesta

De acuerdo a un informe reciente de la organización Change.org, la plataforma de campañas sociales más grande del mundo y con más de 2 millones de usuarios activos en Colombia, en 2021 se han reportado cerca de 1.200 casos asociados a violencia policial, aproximadamente 100 hechos relacionados con abuso de la fuerza, 26 muertes violentas en manos de uniformados, al menos 4 víctimas de agresión sexual, más de 670 detenciones arbitrarias, 81 víctimas de violencia ocular (el 80% de las víctimas podrían perder la visión por un ojo) y 43 casos de violencia homicida.

Para realizar este análisis Change.org consultó, analizó y cruzó datos recientes de la ONG Temblores y tuvo acceso a datos de la Policía Nacional y del Ministerio de Defensa, entre otras fuentes.

Y es que el comportamiento de algunos uniformados de la policía en Colombia es preocupante y así lo evidencia los resultados de una reciente encuesta de Invamer que, a raíz del paro Nacional, confirma que esta institución llegó recientemente a un índice de desfavorabilidad récord en toda su historia: el 56% de los encuestados afirmó que tiene una imagen negativa de la misma. Preocupante indicador si además se tiene en cuenta que, en abril de 2020, la misma encuestadora señaló que la institución tenía una favorabilidad del 75%.

La situación de la policía actualmente evidencia una crisis de preocupantes dimensiones y no es para menos, pues la misma institución cuenta con registros que ratifican que solo este año hay investigaciones abiertas por “presuntas faltas disciplinarias” que comprometen a 228 uniformados. Estas, según la propia policía, se asocian a abuso de autoridad (108 casos), homicidio (16), agresiones físicas (45), lesiones personales (25) y otras conductas (34).

Pero esta percepción hacia la institución no solo es evidente en las preocupantes cifras, también en los casos de cientos de colombianos, como el que recientemente conoció Change.org de Álvaro Herrera, un músico capturado por unos civiles que lo llevaron a un CAI, en donde fue esposado, golpeado y denigrado intentando obligarlo a declarar frente a un celular que estaba “tirando piedra” en medio de las protestas.

Su historia logró que más de 67.000 ciudadanos se unieran para firmar de forma digital una petición promovida por el mismo Álvaro y que hoy es viral en redes sociales, a través del #AReformarLaPoliciaYa y en la plataforma de Change.org (https://n9.cl/bpv9k).

Este movimiento es un esfuerzo de participación ciudadana que asimismo ha construido un proyecto de ley (aquí puede consultar el borrador del documento: https://acortar.link/TNEcPJ) que busca reformar la Policía Nacional y convertirla en una que respete y proteja la vida acabando totalmente con los abusos de la autoridad.

“De hecho, se proyecta que esta campaña digital, que sigue sumando firmas, genere una fuerte incidencia en los debates de los proyectos presentados por el Presidente Iván Duque para que víctimas como yo del abuso policial seamos realmente escuchadas y nuestra propuesta de reforma abierta y participativa sea incluida en todos los debates que sobre el tema se hagan en el Congreso de la República”, afirmó Álvaro.

Como dato de contexto, la última vez que se reformó a la Policía Nacional fue en el año 1994, tiempos en donde la militarización y la lucha contra la guerrilla eran la prioridad. Ahora, 27 años después, este movimiento ciudadano, al que cualquier persona se puede unir en la página https://www.areformarlapoliciaya.com/ propone que la nueva clave sean los derechos humanos y que la ciudadanía no es enemiga de la policía.

Ahora, si bien el Presidente Duque anunció dos proyectos de ley para esta nueva legislatura como avances de la reforma policial, uno para actualizar el estatuto policial y otro para la profesionalización de los patrulleros de la policía; esta iniciativa ciudadana es el eje que concentra la participación de miles de personas, organizaciones y víctimas de abusos policiales que buscan que su voz sea escuchada en el legislativo.