Una estudiante universitaria se quedó parcialmente ciega después de que el cargador defectuoso de su teléfono móvil explotara y le saltara una chispa en el ojo.
La estudiante de Derecho Esther Modede, de 19 años, de Birmingham (West Mids), estaba enchufando su teléfono la noche del 27 de abril cuando se dio cuenta de que el cable estaba un poco dañado.
Poco después, el teléfono de Esther y el cargador empezaron a arder y se percató de que empezó a salir humo del cable.
Momentos después, el cable explotó y una de las chispas alcanzó a Esther directamente en el ojo, dejándola sin poder ver por el ojo izquierdo.
Le puede interesar:Artista completa sus obras con la ayuda de hormigas vivas