Al menos dos personas han muerto en un último enfrentamiento entre la guerrilla del Ejército de Liberación Nacional (ELN) y el Clan del Golfo registrado en una zona rural del municipio antioqueño de Cáceres, el norte de Colombia.
Por el momento, se desconoce la identidad de estas dos personas fallecidas, si bien ambas vestían uniformes de las fuerzas de seguridad colombianas cuando sus cuerpos fueron encontrados en la vereda El Tigre, en Cáceres.
A pesar del uniforme que vestían, las autoridades creen que los fallecidos formaban parte de alguno de los citados grupos armados. En los últimos años han aumentado los casos de robo de material militar, incluido la venta ilegal de la vestimenta que utilizan los soldados colombianos.
Este suceso tiene lugar en medio de los temores de las comunidades locales por la posibilidad de un aumento de los enfrentamientos entre grupos armados por la disputa de los réditos de las economías ilegales, después de una relativa calma.
“Te muestra un escenario muy preocupante sobre posibles avanzadas y fortalecimientos territoriales, o planes de expansión que ponen en riesgo a la población civil”, ha explicado Óscar Yesid Zapata, uno de los líderes locales.