La semana previa a las elecciones presidenciales en primera vuelta, sirvió de excusa para que el presidente del Senado, Juan Diego Gómez, aplace una vez más la citación a plenaria para votar la ratificación de Colombia a la firma del Acuerdo de Escazú.
En la agenda de la semana aparecen citados a una serie de encuentros con parlamentarios de Latinoamérica y organizaciones de la sociedad civil y únicamente la Comisión Segunda citó a debate de control político. Las otras seis siguieron el ejemplo de la plenaria y se abstuvieron de llamar a sus integrantes.
Para el senador Antonio Sanguino, ponente de la ratificación del Acuerdo de Escazú, “esto hace parte del juego que según él, el presidente del Senado le hace al Gobierno Nacional para dilatar la votación”.