La Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) ha recuperado y reubicado 416 cuerpos localizados en bolsas y bidones en un cementerio del departamento de Antioquia, en una movilización sin precedentes de la que se espera descubrir a víctimas del conflicto armado cuyo paradero aún se desconoce.
La operación ha tenido lugar en el cementerio La Dolorosa del municipio de Puerto Berrío, en virtud de una medida cautelar ordenada por la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP), la justicia transicional surgida de los acuerdos de paz firmados en 2016 con la guerrilla de las FARC.
La directora de la UBDP, Luz Marina Monzón, ha asegurado en un comunicado que los primeros indicios ya apuntan que entre los cadáveres exhumados podría haber víctimas de desapariciones: “Nuestra investigación humanitaria indica que entre los cuerpos que fueron reubicados al menos 104 presentan lesiones que pueden corresponder a muerte violenta y potencialmente ser personas que fueron desaparecidas”.
Los cuerpos ha sido trasladados a dos celdas de custodia mientras avanzan las pesquisas, que podrían ampliarse próximamente con futuras investigaciones en el mismo cementerio, tanto en los osarios comunes como en las tumbas y nichos individuales.
“En el marco de los Planes Regionales de Búsqueda hemos encontrado que en algunos los cementerios de los municipios ribereños pueden estar los cuerpos de víctimas de desaparición que fueron arrojados en distintos ríos del país”, ha explicado Monzón. Así, parte de los cuerpos localizado en Puerto Berrio corresponderían a víctimas arrojadas al río Magdalena.
Solo en Puerto Berrío hay registros de 851 personas desaparecidas, dato que se elevaría a 7.360 si se tiene en cuenta toda la zona de Magdalena Medio. Las autoridades han comenzado ya a estudiar casos y a realizar entrevistas para tratar de esclarecer el posible paradero de algunas de estas víctimas y comprobar si corresponde con alguna de ellas los restos reubicados.