La Alcaldía del municipio de San Gil, Santander, decretó el racionamiento de agua como medida para que la población inicie el ahorro de agua y entre todos ayuden a evitar que más adelante se tenga que hablar de cortes permanentes del servicio durante el día.
La suspensión del servicio se da entre las 10:00 de la noche y las 4:00 de la mañana, todos los días, pero por sectores. El casco urbano y las 3 veredas que reciben el servicio se dividieron por zonas y a cada se le costará el servicio un día a la semana., informó Karen Cediel, gerente de la empresa de servicios públicos sangileña.
La decisión fue motivada por la reducción del nivel de agua en las bocatomas de las las quebradas Curití y Cuchicute, desde donde se abastece la red de acueducto de la capital turística de Santander.