El pasado jueves 22 de octubre será una fecha que, para la democracia, para el país y para la política tendrá su significación. Será un testimonio de la actitud inescrupulosa de una mayoría en el Senado de la República que no les importó atropellar ni la ley, ni la Constitución y tampoco, los principios y la ética pública.
Había una sesión de dos hechos de control político, uno convocado por el senador Roy Barreras, entorno a la gestión del Ministro de Defensa Carlos Holmes Trujillo, sobre temas de seguridad nacional, orden público y asuntos de esa cartera. Y había una segunda parte de la sesión que tenía que ver con la moción de censura convocada por el senador Jorge Enrique Robledo y un número plural de más de diez senadores, con el objeto de evaluar lo relacionado con la presencia de tropas extranjeras, tropas de los Estados Unidos en Colombia sin la respectiva autorización contemplada en el artículo 173 de la Constitución política, que establece que el Senado de la República y el Consejo de Estado son las instituciones competentes para autorizar al ejecutivo el permiso de ingreso y tránsito de tropas extranjeras en el país.
Se cumplió el primer acápite de esta sesión, con una intervención brillante, magistral, que felicitamos y reconocimos del senador Roy Barreras, quien preparó con mucha información, con mucho fundamento y un profundo análisis sobre la ineficiencia del Ministerio de la Defensa, del mismo ministro y de la conducción de la fuerza pública en el país. Muchos hechos documentados, con testimonios, vídeos y otro tipo de pruebas muy graves, sobre, por ejemplo, la muerte del cooperante italiano ocurrida en San Vicente del Caguán, en el Caquetá, que tiene claras muestras de haber sido asesinado por haber documentado en fechas anteriores lo relacionado con el bombardeo en zonas del Caquetá y Meta donde murieron varios niños y que ocasionó el retiro del anterior Ministro de Defensa, Guillermo Botero.
También hechos delicados como la ocurrencia de más de 173 masacres entre el año 2019 y lo que va del 2020 y en las cuales han muerto muchos niños, muchos jóvenes, muchos estudiantes a manos de grupos armados ilegales, a manos de organizaciones oscuras ante la pérdida del territorio que prácticamente ha condenado a las regiones a este estado de cosas sin que el Ministerio de la Defensa asuma la conducción responsable y eficiente de la fuerza pública. Razón tienen las encuestadoras cuando muestran que en la opinión nacional ya no tienen la favorabilidad, ni la Policía, ni el Ejército por estos resultados y no es responsabilidad de una tropa, es responsabilidad de la conducción del gobierno nacional, en cabeza del Ministro de Defensa, quien es el responsable político- administrativo, no podrá ser responsable penal, pero tiene que responderle al país por todo lo que viene ocurriendo.
Y de la misma manera hay muchos otros hechos, además de las masacres, entre ellas, la de los ocho jóvenes estudiantes en el municipio de Samaniego, Nariño, Leiva también en Nariño, de los estudiantes que caen a manos de movimientos armados ilegales que han ensangrentado nuestros departamentos de Nariño, el Cauca y otras regiones de Colombia como los Montes de María, el Catatumbo, el bajo Cauca antioqueño, etc, sin que exista por parte del gobierno y de las instituciones de control, prácticamente respuestas. Simplemente se obtienen manifestaciones, anuncios, comunicados, pero no resultados.
Hubo un ataque bastante agresivo contra Roy Barreras y contra quienes convocamos este debate que lo hicimos con argumentos, solo se recibió de la bancada de gobierno, insultos, descalificaciones, agresiones personales, especialmente al senador Roy Barreras, pero ni respuestas de la bancada de gobierno, ni tampoco del ministro de Defensa, que no dio respuesta concreta a los hechos.
Hasta ahí las cosas iban bien, no para el gobierno, sino para la institucionalidad porque venía llevándose bien la sesión en su primera parte como ya la hemos descrito, pero cuando iba darse paso a la segunda parte del debate con la moción de censura por los hechos de la presencia de tropas extranjeras, senadores del Centro Democrático y de los partidos aliados al gobierno sacaron una proposición en la cual daban el paz y salvo de una buena gestión del ministro de la Defensa, pero también manifestando que por fallo de una tutela por parte del Consejo de Estado ya no se requería el control político de moción de censura sobre el tema de la presencia de tropas extranjeras, algo traído de los cabellos, sin ningún fundamento formal de ese criterio y menos en fundamento legal y constitucional.
La moción, estaba aprobada formalmente por parte del Senado como lo establecen los mecanismos de control político y de garantías del derecho de la oposición, ya se había convocado el debate y con la firma del número de senadores establecidos en la ley y en la Constitución, con ellos tenía que llevarse a cabo la segunda parte de la sesión.
¿Qué pasó? De manera irreglamentaria, inescrupulosa, atropellando, 58 senadores manifestaron que no debía adelantarse el debate de moción censura, algo absolutamente irreglamentario, que raya con un comportamiento, además de inescrupuloso, indecoroso, antiético en la función pública, conlleva responsabilidades disciplinarias y penales porque se ha configurado con ello, un posible prevaricato, abuso de autoridad y abuso de función pública por parte de los 58 senadores y que prácticamente la información por parte de otros colegas que, van a recibir la respectiva denuncia, demanda penal ante la Corte Suprema de Justicia para que respondan por este hecho absolutamente ilegal y violatorio de los principios de la democracia en nuestro país.
No hay respeto, se trata de una manifestación de dictadura, promovida desde el gobierno y con el aval de 58 senadores que tendrán que responderle no solamente a la Corte Suprema de Justicia, sino al país. No puede haber en Colombia ese tipo de comportamientos, mucho se ha criticado en nuestro país el “castrochavismo”, la dictadura de Venezuela, el comportamiento de los parlamentarios en ese caso de los diputados, pero acá en Colombia están haciendo algo similar de lo que se hace en Venezuela, donde se atropella a la oposición y aquí está haciéndose algo igual o peor.
Esto será un grave antecedente para la democracia colombiana y qué nos esperará si eso lo hace el gobierno con el acompañamiento de las mayorías en el Senado de la República. ¿Qué nos esperará a los colombianos? creemos que vendrán días más graves para el país en materia de política y de democracia, estemos preparados.