Se radicó el proyecto de ley ordinaria de la Jurisdicción Agraria, “por medio del cual se determinan las competencias de la Jurisdicción Agraria y Rural, se establece el procedimiento especial agrario y rural y se dictan otras disposiciones”. Primero se aprobó el Acto Legislativo que crea la Jurisdicción Agraria y el Acto Legislativo que reconoce al campesinado como sujeto de especial protección constitucional.
Este esfuerzo legislativo de los últimos dos años abre un horizonte de esperanza para la implementación integral del punto 1 del Acuerdo de Paz. Al Acuerdo sus finanzas le fueron saqueadas (12 billones de las Regalías OCAD-PAZ). Este gobierno y la voluntad política de nuestra bancada abren una ventana de oportunidad para solucionar el problema agrario como la causa estructural del conflicto social y armado. Se trata de un anhelo de más de 90 años para llevar justicia al campo.
Es que hablamos del derecho a una justicia agraria pero también del derecho a una vida digna para la población campesina. Con este proyecto se dan herramientas judiciales, el campesino va obtener justicia en su lucha por el derecho a la tierra, a la semilla, y a la vida digna en sus territorios. Es justicia social en un país que le ha dado la espalda al campesinado, generando ciclos de guerras que han afectado a millones de familias campesinas, y a comunidades que habitan la ruralidad como son los pueblos étnicos.
En medio del escándalo por los 12 billones robados de las Regalías OCAD Paz en el Gobierno Duque, en el Gobierno del Cambio hay muchos avances que hoy celebramos. Hacer justicia con el campesinado históricamente excluido es motivo de celebración. Esta ley por fin dispone de una institucionalidad judicial para la población rural y poder resolver conflictos agrarios de manera pacífica y desde la legalidad.
La jurisdicción agraria va a garantizar entonces el derecho de acceder de manera rápida y ágil a la justicia, un paso hacia la modernización del campo colombiano. ¡Jueces Agrarios para el campesinado es cumplir el Acuerdo de Paz!