Debemos rememorar a nuestras mujeres todos los días. Y Siempre debe ser por sus grandes gestas para posicionarse en una sociedad orbital aun anclada en ese añejo y soberbio machismo. Por eso, tras haber leído el libro de Ángela Dorotea Merkel, #CrónicaDeUnaEra, trataré de enaltecer el legado femenino de la “introvertida científica”, que en 16 años consecutivos logró, según mi lectura, cambiar el “chip” de hacer política en un país presuntuoso de igualitario, pero extremadamente “testicular” en las lides de la “cosa política” en una de las potencias mundiales como es Alemania.
Inicialmente, quisiera, con todo respeto invitar a las mujeres próximas a iniciar una carrera o proyecto político a seguir los pasos de la primera mujer canciller en el país teutón realizando una juiciosa lectura de este libro porque deja en evidencia la importancia tener una formación universitaria sólida y disciplinada, una ética y moral intachable y una fuerte dosis de responsabilidad humana. Los tres últimos factores, esenciales, por cierto, en momentos borrascosos para algunas “políticas criollas”, que con grandes suspiros de llegar a ser presidentas cazan peleas verbales tratando de: “perro rabioso o lavaperros” a sus pares en debates. ¡Alto! Senadora Pizarro y Ex Alcaldesa López, así es un asco pensar en llegar a ser las “primeras damas de hierro” en esta colapsada Colombia. Merkel es su ejemplo!
Por esto último, la iniciativa de tratar de matizar en estos párrafos, las 289 páginas de Crónica de una era, pero en esencia destacando que ni los mismísimos alemanes presagiaron a una desconocida, introvertida e investigadora científica, hija de un pastor protestante, criada en la antigua Alemania Comunista -hecho histórico nada menor- fuera convertirse con el paso de los años y el aprovechamiento de esas oportunidades brindadas por la vida, como la líder mundial para entender la Europa y el mundo de las últimas décadas. “Aterriza en la política como una marciana, en un partido muy masculino, de políticos del oeste. Era una mujer divorciada, sin hijos, protestante. Era una rareza”, dice Ana Carbajosa, autora del libro.
Según la autora, Merkel y su liderazgo femenino se convirtieron en un ejemplo de racionalidad, convicciones morales y un destacado consenso para enfrentar crisis dentro y fuera de la poderosa Alemania. Otros tres temas ausentes en los gobiernos de turno de Colombia, Centro y Sur América, que sin medir pudor toman decisiones contrarias a las necesidades de sus pueblos, se apegan a sus convicciones ideológicas para empoderarse y, ante las crueles dificultades sociales enardecen las emociones de sus seguidores para generar caos e inestabilidad. “La libertad, la democracia y el estado de derecho”, fueron principios y valores nunca negociables con la líder de la manada, como la calificaron en su momento los jefes de las naciones del G-7, una “cosa política” nada menor en ese poderoso mundo de los líderes políticos.
A mi parecer, la inteligente política Merkel, usando su método científico propició argumentos teóricos estratégicos para enfrentar sin miedo el renacimiento de la ultraderecha -secuelas arraigadas del nacismo-, la entrada de más de un millón de refugiados pese a la contrariedad de millones de alemanes nacionalistas, la defensa de la austeridad en Europa, la gestión de la crisis del coronavirus, y a mi parecer, lo más importante en estas letras, el imponente liderazgo femenino en un mundo de hombres. “Del sacrificio de Grecia en la crisis del euro a la dignidad de la acogida a refugiados o la firmeza frente a la extrema derecha. La Europa del siglo XXI no se aplica sin Ángela Merkel”, dice Javier Solana Representante de la Unión Europea.
Estoy seguro de quedar corto en mis loables apreciaciones sobre el libro de “La Merkel” -esto último sin ínfulas de confianza- la idea es que cada interesado por la vida de ella se pegue un paseo por la lectura de su obra. No me gano un peso, ni me voy a volver tendencia en redes sociales, pero estoy seguro nos invitará a cuestionarnos cuándo en estas esquinas del sub desarrollo tendremos una líder con las capacidades académicas, éticas y morales y socialmente humanas para brindar a las nuevas generaciones aires de un país mejor. Recordemos a nuestras mujeres en todos los marzos venideros por sus luchas cotidianas dejando huellas memorables… Con ustedes Ángela Dorotea Merkel y su mundo en 300 páginas, léalo…
#Parzival: ¿Usted, Le apostaría una mujer presidenta en Colombia?