La cantante Jennifer López decidió alejarse unos días de su rutina de trabajo y pasar unos días en Italia, lejos de todos, incluyendo a su esposo Ben Affleck.
Estos días de descanso parecen ser la confirmación de su nueva separación matrimonial por el mal momento que parece estar atravesando la pareja de artista.
Durante sus cortas vacaciones la interprete de Let get laud, disfrutó de un paseo en bote en la ciudad de Sorrento en la costa de Amalfi, al parecer, con la intención de encontrar un poco de paz en medio de la tormenta., vistiendo ropa cómoda y totalmente informal y relajada.