Selena Gómez ha decidido desnudarse en cuerpo y alma en una entrevista para la revista GQ, donde además de protagonizar una sensual sesión de fotos la cantante ha revelado datos de su vida que jamás hubiéramos imaginado.
Y es que hay veces que las apariencias engañan, y el caso de Selena Gómez es un claro ejemplo de ello. La fama no tiene siempre porque conllevar una vida fácil y menos si llevas siendo un personaje conocido desde que apenas eres un niño.
Si le dieran a Selena la opción de borrar del calendario el año 2014 seguro que lo haría. La cantante ha confesado que no fue precisamente un año lleno de alegrías y buenas noticias: “Me diagnosticaron lupus. Mi mamá tuvo un aborto espontáneo y todo el mundo se enteró de ello. Cancelé mi gira porque necesitaba tiempo para estar bien. Tuve que someterme a un tratamiento de quimioterapia en diferentes lugares”, dijo.
Como consecuencia, aquel año Selena tuvo que cancelar su gira para tratar el lupus y recuperarse. Pero no fue uno de los momentos más duros de su vida por las dolencias en sí, también por las informaciones que los medios de comunicación publicaron (llegaron incluso a decir que la cantante estaba en una clínica de rehabilitación para recuperarse de su adicción a las drogas).