El secretario general de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), Ban Ki-moon, y el presidente del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR), Peter Maurer, formularon una advertencia sin precedentes sobre el impacto que los conflictos actuales tienen en los civiles.
Ambos dirigentes subrayaron la importancia de respetar el derecho internacional humanitario a fin de contener el caos y de evitar mayor inestabilidad.
“Rara vez hemos visto tanta personas desplazándose, tanta inestabilidad, tanto sufrimiento”, dijo el Presidente Comité Internacional de la Cruz Roja. “En los conflictos armados que tienen lugar en Afganistán, Irak, Nigeria, Sudán del Sur, Siria, Yemen y otras partes, los combatientes infringen las normas de humanidad más fundamentales. Cada día nos enteramos de casos de civiles que mueren o resultan heridos como resultado de la violación de las normas básicas del derecho internacional humanitario con total impunidad. La inestabilidad se extiende y el sufrimiento aumenta. Ningún país puede permanecer ajeno a esta situación.”
Unos sesenta millones de personas en todo el mundo han tenido que desplazarse de sus hogares a raíz de conflictos y de violencia; se trata de la cifra más alta desde la Segunda Guerra Mundial. Los conflictos se han vuelto más prolongados, lo que significa que numerosas personas desplazadas pasan años alejadas de sus hogares, sus comunidades y sus medios de sustento.
“Ante esta flagrante inhumanidad, el mundo ha respondido con una parálisis preocupante”, señaló el secretario general de la ONU. “Esa actitud contradice la mera razón de ser de las Naciones Unidas. El mundo debe reafirmar su humanidad y respetar los compromisos asumidos en virtud del derecho internacional humanitario. Hoy hablamos con una sola voz para instar a todos los Estados a adoptar medidas inmediatas y concretas que permitan aliviar el sufrimiento de los civiles.”
Ambos dirigentes subrayaron que la ONU y el CICR ocupan un lugar único como testigos de las consecuencias de los conflictos. El principio de humanidad es un elemento central de la Carta de las Naciones Unidas y del cometido y la misión del CICR.
La XXXII Conferencia Internacional de la Cruz Roja y de la Media Luna Roja, que se celebrará en diciembre de 2015, y la Cumbre Humanitaria Mundial, que tendrá lugar en mayo de 2016, harán hincapié en la urgencia de adoptar medidas concretas para proteger a los civiles en los conflictos armados.
Sin embrago, las dos organizaciones -ONU y CICR- instaron a los Estados a que adopten las siguientes medidas en forma urgente:
*Redoblar los esfuerzos para hallar soluciones sostenibles a los conflictos y adoptar medidas concretas con ese fin.
*Utilizar, individual y colectivamente todos los medios posibles para ejercer influencia en las partes en conflictos armados a fin de que respeten el derecho; por ejemplo, realizar investigaciones efectivas sobre las infracciones del derecho internacional humanitario.
*Responsabilizar a los autores de las infracciones y poner en práctica mecanismos concretos para mejorar el cumplimiento del derecho;condenar a los autores de violaciones graves del derecho internacional humanitario, como los ataques deliberados contra civiles e infraestructura civil.
*Garantizar el acceso sin obstáculos de las misiones médicas y humanitarias, y proteger al personal y los establecimientos médicos y humanitarios.
*Prestar protección y asistencia a las personas desplazadas en el interior de un país y a los refugiados mientras huyen de la inseguridad, así como ayudarles a encontrar soluciones de largo plazo, brindando apoyo al mismo tiempo a los países y las comunidades de acogida.
*Poner término al empleo de armas explosivas pesadas en zonas habitadas.