Se esperaría que el mandatario de una nación tenga el suficiente conocimiento y un buen nivel académico para poder llevar de manera adecuada un cargo de alto rango como la presidencia de un país. Sin embargo, en América Latina solo tres mandatarios han tenido o tienen formación doctoral y maestría. El presidente Juan Manuel Santos es uno de los pocos mandatarios que cuenta con preparación adicional.
La inversión pública y privada en la formación académica para la investigación y el desarrollo en América Latina está por debajo del ideal internacional. Esto se puede ver reflejado, en la poca preparación académica de los presidentes de estas naciones, así lo afirmó el profesor de la Facultad de Ciencia Política y Gobierno de la Universidad del Rosario, Carlos Maldonado.
A través de la historia algunos países latinoamericanos se han caracterizado por tener gobiernos fuertemente presidencialistas, que quizás se han podido ver opacados por otros, debido a falencias dentro del mismo sistema político del mandatario.
Actualmente, la máxima preparación educativa para un profesional es indispensable ya que con esta se puede abrir una serie de oportunidades dentro de un ámbito laboral.
Se podría suponer que uno de la ‘personalidades’ que más preparación, más allá de un título universitario, debería de tener para su cargo es el presidente de un país. Pero increíblemente los únicos que poseen un título doctoral, hasta al momento, son los expresidentes mexicanos Ernesto Zedillo (1994-2000) y Carlos Salinas de Gortari (1988-1994) y el actual presidente ecuatoriano Rafael Correa.
En cuanto a la formación en maestría, el presidente Juan Manuel Santos tiene dos títulos, así como el expresidente mexicano Miguel de la Madrid (1982-1988) y la chilena Michelle Bachelet (2006-2010).
“Educación de Presidentes. Un estudio crítico”, es un análisis realizado por el profesor Carlos Maldonado, el cual refleja que una inmensa mayoría de los presidentes en América Latina cuentan solo con título de pregrado y otros, muy pocos, algún estudio superior.
De acuerdo con Maldonado, uno de los motivos por los cuales los presidentes latinoamericanos no cuentan con un nivel de preparación académica sobresaliente, se debe a que el gasto de los estados en formación científica es bastante bajo.
Dentro del análisis, el pedagogo resalta a aquellos presidentes que no tuvieron estudios universitarios pero que se han destacado. Por ejemplo el brasileño Lula da Silva (2003-2010) y el actual presidente uruguayo José Mujica, ambos, según Maldonado, sobresalientes por su inteligencia, carisma y prestigio internacional.
“Con excepción de los casos mencionados, los demás presidentes de la historia del continente solo tienen pregrado o algún estudio adicional, por ejemplo una especialización”, aseguró el académico.
