Nuevo supermartes. Los republicanos ponen en juego un total de 172 delegados.
La carrera electoral estadounidense vuelve a vivir este martes una jornada de infarto ya que otros cinco estados como Pensilvania, Connecticut, Maryland, Delaware y Rhode Island acogen sus primarias, tanto para el partido demócrata como para el republicano.
Es precisamente entre los conservadores donde el senador por Texas, Ted Cruz, y el gobernador de Ohio, John Kasich, han alcanzado un acuerdo cordial para intentar bloquear la nominación republicana del polémico Donald Trump. Una estrategia que el propio multimillonario ha tachado de “desesperada”.
Según el acuerdo alcanzado entre ambos candidatos republicanos, Cruz centrará sus fuerzas en las primarias de Indiana, que se celebrarán el próximo 3 de mayo, sin que Kasich se interponga en su camino.
El senador de Texas hará lo propio en Oregón (que celebra primarias el 17 de mayo) y Nuevo México (donde las primarias serán el 7 de junio) dejando vía libre al gobernador de Ohio para que intente arrebatar delegados en dichos estados al empresario inmobiliario.
Durante la jornada del martes, los republicanos ponen en juego un total de 172 delegados. Hasta la fecha, Trump lidera el número de delegados, con un total de 845, frente a los 559 de Cruz o los 148 de Kasich. Con la estrategia urdida entre el senador de Texas y el gobernador de Ohio se pretende hacer más difícil que Trump logre los 1,237 delegados necesarios para asegurarse la nominación del partido republicano en la convención que se celebrará el próximo 18 de julio en Cleveland.
En estos momentos, el multimillonario lidera con un amplio margen las encuestas en los cinco estados que acuden a las urnas. En el caso de Hillary Clinton, la ex secretaria de Estado, cuenta con una ventaja considerable en Pensilvania, donde están en juego 210 delegados, y en Maryland, donde se reparten otros 118.
En otros estados como Connecticut y Rhode Island, la ventaja con respecto al senador de Vermont, Bernie Sanders, es más ajustada.