El gremio ganadero del país consideró que si bien la decisión empresarial de Alpina de instalarse y producir en Estados Unidos es sana e impecable, la competencia con firmas posicionadas del país del norte podría terminar en la exportación de derivados lácteos a Colombia.
El gremio ganadero del país consideró que si bien la decisión empresarial de Alpina de instalarse y producir en Estados Unidos es sana e impecable, la competencia con firmas posicionadas del país del norte podría terminar en la exportación de derivados lácteos a Colombia, sacando provecho del menor precio de la leche en Norteamérica.
El presidente de la Federación de Ganaderos de Colombia (Fedegan), José Félix Lafaurie declaró en Confidencial Colombia que a la empresa nacional le quedará más fácil traer al país leche americana, procesada en los Estados Unidos, situación que se convierte en una gran oportunidad para Alpina, pero también en un gran riesgo para los ganaderos que le siguen apostando al tema lácteo.
“Es evidente que hoy la leche en Estados Unidos es mucho más barata que la que se le paga al productor aquí en Colombia, estamos hablando de precio litro de 22 centavos de dólar en Norteamérica contra 47 en tierras colombianas, contexto que marca grandes diferencias”, informó Lafaurie.
Lo de Alpina, empresarialmente es muy bueno, pero en el contexto país produce cierta reserva porque a la final en Colombia tiene sin duda alguna unas ventajas comparativas por el reconocimiento y el aprecio que el consumidor nacional tiene sobre sus marcas. “Creo que una parte importante de su producción en Estados Unidos vendrá a Colombia”.
Para el dirigente gremial los acuerdos comerciales le significarán enormes costos a la ganadería colombiana por lo que insistió en una preparación rápida de políticas sociales que apalanquen la salida de muchos ganaderos del mercado. Indicó que México inició su acuerdo comercial con más de 180.000 productores, catorce años después tan solo quedan 30.000, es decir que 150.000 desaparecieron.
“En una economía como la nuestra, con muchas más debilidades, con menos ventajas comparativas y competitivas, en donde no hay carreteras ni infraestructura, en donde se adolece de bienes públicos, sobre todo en el sector rural, es apenas obvio que habrá un costo más considerable que el asumido por México. En cifras entre 200.000 y 300.000 ganaderos colombianos habrán salido del mercado en diez años, cuando esté en plena vigencia la desgravación arancelaria”, sentenció Lafaurie.
El vocero de los ganaderos explicó que en 2022 será igual producir en Estados Unidos que producir en Colombia y allí la ventaja será para quien produzca a menores costos y llegue con mejor producto al consumidor porque finalmente será ese e que se quedará con el mercado.
Expresó que no es consecuente hablar de las bondades del TLC, como lo manifiesta la cooperativa Colanta cuando celebra el crecimiento en 300 por ciento de las exportaciones de productos lácteos. La cifra es real, pero lo que no se precisa es que al revisar la balanza comercial se encuentra que de ese porcentaje poco hay que celebrar por cuanto se habla de ventas colombianas por valor de 1.4 millones de dólares contra 76 millones de dólares de Estados Unidos al mercado nacional.
“No se porque ese entusiasmo del presidente de Colanta con el TLC cuando salta a la vista que le están quitando gran parte del mercado a una empresa catalogada como la más grande de Colombia”, sostuvo el dirigente ganadero.
Afirmó que otra empresas como Alquería, Algarra, la Gran Vía y la misma Colanta, entre otras del mercado nacional que podrían intentar llegar al mercado americano, pero advirtió que hay riesgos por la asimetría productiva y la estructura de costos.
Agregó que el mercado americano es infinitamente más grande que el colombiano en leche por lo que tendrá ventajas y mayores oportunidades en el mercado interno.
Precisó que una vaca colombiana promedio produce nueve litros por día mientras que una bovina estadounidense entrega 52 litros aproximadamente, lo que se traduce en siete u ocho litros más, haciendo evidente que nada tienen que hacer los campesinos pequeños o medianos que competirán con hatos de Estados Unidos o empresas que producen más de un millón de litros de leche fresca por día.
Dijo que haciendo una comparación con la ganadería de Wisconsin en donde la mitad del Estado está sembrado con maíz y las eficiencias están a la orden del día toda vez que se combinan agricultura con ganadería, garantizando alimentación para los bovinos , es imposible producir leche a más bajo costo que en Estados Unidos.
Para sobrevivir, anotó Lafaurie, hay que hacer unas reconversiones productivas muy profundas, pero dijo que no hay instrumentos para ello porque contrario a los requerimientos de la ganadería criolla, cada vez hay menos herramientas para optimizar la producción del pequeño, mediano o gran productor. En su criterio van a quedar en el limbo los más de 497.000 productores de ganado.
“Colombia tiene muchas y mejores ventajas comparativas que Estados Unidos, pero casi ninguna en materia competitiva. Las ventajas comparativas las registramos porque tenemos trópico que nos garantiza pastura casi todo el año, más sol y abundantes fuentes de agua, pero todo eso queda anulado con las falencias competitivas y la precariedad que origina sobrecostos”, afirmó Lafaurie.
El presidente de Fedegan confirmó que a Colombia ya han llegado algunas importaciones de leche y carne no solo americanas, sino canadienses, argentinas y Uruguayas las cuales muestran mejor precio en leche, pero no en carne.
El consumo de carne en Estados Unidos supera los 13 millones de toneladas frente a las 800.000 anuales de Colombia.
Ganaderos a Estados Unidos
Un grupo de 200 ganaderos viajará este viernes a Estados Unidos, puntualmente a Wisconsin en donde podrán observar los procesos productivos y las eficiencias de la ganadería americana en carne y leche.
La idea es hacer una evaluación para determinar que oportunidades reales hay frente al TLC con Estados Unidos.
“Luego de ese viaje miraremos que frentes debemos o podemos fortalecer y si no a que le apuntaremos en reconversión productiva porque de lo contrario tendremos verdaderos y muy agudos problemas”, concluyó el presidente de Fedegan, José Félix Lafaurie.