Un avión Boeing 777 de Asiana Airlines, con más de 300 personas a bordo, se estrelló al aterrizar en el aeropuerto de San Francisco en un vuelo desde Seúl. Funcionarios de emergencia dijeron que al menos dos personas murieron y que decenas se encontraban heridas.
Algunas imágenes tomadas inmediatamente después del accidente, mostraban a los pasajeros saliendo del avión envuelto en humo. Videos grabados desde el aire permitieron ver el fuselaje de la aeronave gravemente dañado y oscurecido por el incendio que se produjo.
Un equipo de bomberos, enviado a la zona del accidente, afirmó que dos personas murieron y que entre 73 a 103 estaban heridas. Previamente, un diplomático surcoreano en Estados Unidos reportó una víctima fatal y entre 20 a 30 heridos.
Según medios de comunicaciones coreanos, el avión transportaba a unos 292 pasajeros y 16 miembros de la tripulación. También informaron que en la aeronave viajaban 141 ciudadanos chinos, 171 surcoreanos y 61 estadounidenses. Dentro de esa información no se pudo constatar las nacionalidades del resto de los pasajeros.
Rachael Kagan, portavoz del hospital general de San Francisco, aseveró que 10 personas gravemente heridas fueron llevadas al centro de salud, incluyendo dos niños, seis mujeres y cuatro hombres.
Uno de los familiares de los tripulantes del avión, contó que recibió un llamado de su allegado después de sobrevivir al accidente y que describió el lugar como “lleno de humo y aterrador”.
Así mismo, Lynn Lunsford, portavoz de la Administración Federal de Aviación (FAA) de Estados Unidos, dijo que el número de vuelo afectado era el 214.
Imágenes de una cadena de televisión de San Francisco mostraron extensos daños producidos por un incendio en la aeronave, que perdió su cola y una de sus alas en el accidente.
La Junta Nacional de Seguridad del Transporte (NTSB, por sus siglas en inglés) dijo en su cuenta de Twitter que enviaría un equipo de investigación al sitio del accidente.