La sanitaria, que trabaja en el Hospital Carlos III, ingresó a primera hora de este lunes en el Hospital Universitario de Alcorcón y fue inmediatamente aislada, al presentar un cuadro sospechoso de infección. Su caso es el primer contagio del mortal virus fuera de África.
Primer caso de ébola en Europa. Una auxiliar de enfermería que atendió a Manuel García Viejo, el segundo misionero infectado de ébola que murió en Madrid el 25 de septiembre, ha dado positivo en las dos pruebas que se le han realizado a lo largo de este lunes para confirmar que está contagiada del virus.
En el ministerio de Sanidad se ha convocado un gabinete de crisis a primera hora de esta tarde, con la ministra Ana Mato al frente, para analizar cómo abordar este caso pero, de momento, no se ha puesto en funcionamiento ningún protocolo de actuación.
Todas las personas que están en contacto con enfermos de ébola, como ha sido este caso, debían estar tomándose la temperatura dos veces al día durante 21 días para comprobar si tienen fiebre. Según ha podido saber El Confidencial, el recinto hospitalario de Alcorcón envió las muestras de sangre de la infectada al Instituto Carlos III, que a primera hora de esta tarde confirmaba que la enferma padecía ébola.
El protocolo exige someter a la paciente a una segunda prueba sanguínea antes de dar por válido el pronóstico. A las 18.00 horas se confirmaba oficialmente el diagnóstico.
Todavía se desconocen los datos personales de la infectada ni cómo deben actuar las personas que han estado en contacto con ella durante los 14 días que ha estado infectada, ya que el ébola se transmite por fluidos. Se sabe que estuvo en contacto con García Viejo el 24 de septiembre, un día antes de que el religioso, de 69 años, falleciera en el Hospital Carlos III tras contraer el ébola en Sierra Leona. Un mes y medio antes, fallecía en el mismo recinto hospitalario el hermano Miguel Pajares, que había sido repatriado de Liberia.
La muerte de García Viejo, miembro de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios (OHSJD), al igual que Pajares, se produjo casi cuatro días después de ser repatriado a España. Las cenizas de los dos religiosos descansan en el panteón de la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios, en el cementerio madrileño de San Isidro.
Una epidemia devastadora
La epidemia de ébola se ha extendido “sin control” en el oeste de África Occidental ha infectado a miles de personas y se ha cobrado cientos de vidas, una cifra que ya cuadriplica la del brote más mortífero y el primero que se registró en 1976 y que se saldó con 280 fallecidos y más de 300 afectados. Los cuatro países en los que, de momento, se concentra la epidemia son Guinea, Nigeria, Sierra Leona y Liberia, cuatro puntos con los que España no tiene conexión aérea directa. La posibilidad de que salte a Europa es “muy improbable”, aseguran los expertos, pero no imposible.