Un juez sentenció a 52 meses de prisión a los miembros de la banda criminal, que se entregaron en 2011. Fueron hallados culpables del delito de concierto para delinquir, informó la Fiscalía.
La decisión fue adoptada por el Juez Segundo Especializado de Cundinamarca, luego de analizar las pruebas aportadas en el proceso por el Fiscal Cuarto de la Unidad Nacional contra Bandas Criminales (Bacrim).
Según la investigación, la Fiscalía logró establecer, en ocho meses, las funciones que cumplían los sentenciados dentro del Ejército Revolucionario Popular Antiterrorista Colombiano (Erpac) y que ahora pagarán su pena en cárceles nacionales.
El documento explica también que las autoridades investigan si los sentenciados pudieron incurrir en otros delitos cuando hicieron parte de esa banda.
Los procesados integraban un grupo de 300 hombres que se sometieron a las autoridades en diciembre de 2011 en el departamento del Meta y que estaban al mando de Pedro Oliveiro Guerrero, alias “Cuchillo”, muerto en una operación de las fuerzas de seguridad del Estado en 2010.
Quienes se entregaron en esa oportunidad no han recibido ningún beneficio como los amparados por la Ley Justicia y Paz, diseñada para paramilitares y grupos armados ilegales, pero no para narcotraficantes como es el caso del Erpac.
El Erpac nació tras la desmovilización de más de 31.000 paramilitares de las Autodefensas Unidas de Colombia (AUC), entre 2003 y 2006, durante los dos períodos del Gobierno del presidente Álvaro Uribe.
Al Erpac, con presencia en los departamentos del Guaviare, Vichada y Meta, Llanos Orientales y selvas del este colombiano, se le atribuyen centenares de homicidios y tráfico de drogas.
El Erpac es una de las principales bandas de Colombia, país en el que actúan otras doce organizaciones criminales similares.