¿Es el último trimestre con desaceleración económica? En el segundo trimestre de 2016, el PIB creció 2,0% anual (frente al período de abril a junio de 2015)
La industria manufacturera sigue siendo el sector con el mayor crecimiento, tanto cuando se tiene en cuenta la refinería de Cartagena como cuando se calcula una tasa de crecimiento sin incluirla. También se destacan los sectores de servicios sociales y el financiero que, junto a la industria, completaron los tres renglones con crecimientos por encima del PIB total.
Según el análisis hecho por el economista de BBVA Research Mauricio Hernández, el resultado de 2% para el segundo trimestre fue el más bajo de todo el año, pues anticipa una recuperación progresiva de la actividad económica: por el gasto privado en el tercer trimestre, especialmente en inversión, y por la demanda pública, específicamente por el inicio de las obras de la cuarta generación de infraestructura, en el cuarto trimestre del año.
De esta forma, para todo el año se espera un crecimiento del PIB de 2,4%. En 2015, la industria creció 1,9%, en 2014 creció 1,0% y en 2013 y 2012 cayó 0,9% cada año. De este modo, el año 2016 se constituye en el período con el mayor crecimiento de la industria desde 2011, con o sin Reficar, aunque notoriamente más alto cuando se incluye.
En contraposición, la inversión tiene todos los elementos para empezarse a recuperar a partir del tercer trimestre del año.
La industria manufacturera se encuentra creciendo a tasas elevadas. El tipo de cambio se estabilizó en niveles inferiores a los máximos registrados en el primer semestre del año. La vivienda de precios medios, con subsidios del gobierno en gran parte, muestra una dinámica sobresaliente, anticipando una buena actividad edificadora en el segmento medio en los próximos meses.
Y, ya existen cuatro cierres financieros de las obras de cuarta generación, lo cual anticipa el inicio de la ejecución de las mismas, esperada para el cuarto trimestre de 2016.
Hacia 2017, también tendrán un papel especial las exportaciones. La recuperación gradual de algunas economías de Latinoamérica, que son socias comerciales de Colombia, la estabilización de los precios del petróleo en niveles superiores a los 50 dólares por barril y la mejor producción agropecuaria ante la finalización de los fenómenos climáticos, hacen pensar que el comercio exterior colombiano empezará su recuperación progresiva el próximo año.
A largo plazo, esta dinámica de crecimiento, más basada en inversión y exportaciones, que en consumo de los hogares, redundará en una expansión sostenida en el tiempo, aunque inferior al período previo a la caída de los precios del petróleo, en menor endeudamiento de los hogares y en un mayor PIB potencial.