El abogado de ‘Simón Trinidad’ es una víctima de las Farc

Óscar Emilio Silva Duque defiende a uno de los ideólogos más importantes en la historia del grupo guerrillero desde su captura en 2004. Lo hace a pesar de que su hermano fue secuestrado por esta organización en septiembre de 2002. Historia.

El siete de septiembre de 2002, Óscar Silva se enteró que su hermano había sido secuestrado. Hombres armados bajaron del carro a su ser querido y lo adentraron en la selva; hoy, casi diez años después, él y su familia esperan noticias del plagiado.

Eran meses difíciles para el país. En febrero de ese mismo año se terminaron las conversaciones de paz entre el gobierno del presidente Pastrana y las Farc de la peor manera posible, con incumplimientos de los acuerdos y mensajes guerreristas.

Desde ese momento, el grupo guerrillero incursionó en una práctica más que reprochable y se dio a la tarea de secuestrar civiles y militares para forzar un canje humanitario y recuperar presos “políticos”.

En ese entonces, Ricardo Ovidio Palmera Pineda alias ‘Simón Trinidad’ era el comandante de varios frente con influencia en el norte del país, especialmente en el departamento del Cesar. Acababa de salir del fracasado proceso de paz, donde integró la mesa como especialista en economía y en las finanzas de las Farc.

Años después, cuando ‘Trinidad’ se encontraba en territorio ecuatoriano realizándose exámenes médicos, fue capturado y deportado hacia Colombia, donde se cuajó su extradición a los Estados Unidos.

En 2004, año en el que cayó el líder guerrillero, Silva recibió una llamada de un amigo en Valledupar, quien lo puso en contacto con ‘Simón Trinidad’. Desde que se conocieron, abogado y guerrillero son defensor y defendido.


Confidencial Colombia habló con Óscar Emilio Silva, una de las miles de víctimas que ha dejado el secuestro, que tuvo la oportunidad de preguntarle a uno de los líderes de las Farc por la suerte de su hermano.

Ahora asume ese episodio como parte del pasado y se encamina a apoyar el proceso de paz entre el gobierno y la guerrilla. Él fue la persona que le informó a ‘Trinidad’ de los acercamientos entre los actores y la solicitud que hizo la insurgencia de que él estuviera en la mesa de negociadores.

Asegura que las medidas de seguridad contra él en Estados Unidos son muy extremas, que jamás hablaron de “chismes” y que prefirieron compartir literatura y escritos de Vargas Llosa. Cree que en el posconflicto, ‘Trinidad’ puede ser un líder de Colombia y que la iniciativa de paz debe pasar por la discusión sobre el fenómeno del secuestro.


Conociendo a ‘Simón Trinidad’


CC: ¿Cómo conoció a ‘Simón Trinidad’ y terminó siendo su abogado?


OSD: Yo llegó ahí porque un amigo en común de Valledupar me refiere cuando se produce la captura de ‘Simón Trinidad’. Mi amigo me pide que le lleve algunas cosas a su sitio de reclusión, en el bunker de la Fiscalía, y ahí tuvimos la oportunidad de conocernos y de interactuar.

Hablamos de una situación personal y hubo una empatía, por eso él me pidió que lo acompañara en su defensa. Ese fue el motivo.

Otra de las razones por las que decidí aceptar la defensa de ‘Simón Trinidad’ es porque el 7 de septiembre del 2002, un hermano mío fue secuestrado por las Farc. Diez años después, no sabemos todavía qué pasó con él.

Si bien esa situación en particular no fue el motivo principal para decidirme a defender a ‘Trinidad’, me interesaba tener contacto con algún líder de las Farc para saber la suerte de mi hermano. Sin embargo, no hemos podido conocer el paradero de mi familiar.


CC: ¿Cómo se llama su hermano?


OSD: James Silva Duque.


CC: ¿Qué le dijo ‘Simón Trinidad’ cuando usted le preguntó por el caso?


OSD: Con posterioridad a la solicitud de que lo defienda, tuve la oportunidad de comentarle la circunstancia y él me dice que el lastre político del secuestro es lo peor que le puede suceder a las Farc.

Él no está de acuerdo con esa forma de lucha debido a que cada secuestro debe tener un objetivo, y que cuando este norte se pierde crea dolor, incertidumbre en las familias y es una situación que políticamente no les conviene. ‘Trinidad’ lamenta mucho en ese momento el secuestro de mi hermano pero me dice que no puede hacer ninguna gestión por encontrarse detenido.


CC: ¿Quién era su hermano para caer en un secuestro?

OSD: En febrero de 2002 se rompen los diálogos de paz en el Caguán, y en los meses siguientes comienzan a darse secuestros masivos para forzar un canje humanitario. Mi hermano era un funcionario de la Fiscalía General de la Nación que prestaba sus servicios en Villavicencio y en una visita que hacen a un sector rural ubicado entre Restrepo y Cumaral, guerrilleros vestidos de civil le indagan sobre su condición.

Él ingenuamente manifiesta que es funcionario público. Los insurgentes lo dejan ir a la actividad pero de regreso paran el vehículo donde él se moviliza y lo bajan hombres armados. Lo internan en la selva y desde entonces no ha pasado nada.


CC: Es una situación difícil defender a una persona que hace parte de un grupo que atentó contra su familia. ¿Por qué hacerlo?


OSD: Es indudable que el tema está superado, y en ningún momento he tenido odio hacia él porque no estuvo en su secuestro. Para mí fueron suficientes las palabras cuando me dijo que el lastre político de las Farc es esta práctica; yo quedo satisfecho con la respuesta que me da cuando le pido respuesta por la suerte de mi hermano.

En mí no hay odio ni para él ni para los que perpetraron este plagio contra mi ser querido, porque hay un ambiente de paz y haría mal si hostigo un panorama de odio. Para que haya cambio se necesita que algo cambie, y si va a cambiar algo, no puedo ser un obstáculo.

Lo único que auguramos es éxito a los señores de las Farc y del Gobierno y les pedimos que se genere una agenda aparte sobre el tema de los secuestrados para que, caso por caso, se analice dónde están los cuerpos de nuestros familiares para poder darles cristiana sepultura.

El secuestro es un fenómeno colectivo que el país debe tener en cuenta con miras a la reconciliación con las Farc.


La mesa del diálogo y la paz


CC: ¿Cómo fue la experiencia de ser la primera persona en contarle a ‘Simón Trinidad’ que el gobierno y las Farc estaban generando acercamientos de diálogo?


OSD: La comunicación que sostuve fue casualmente el 6 de septiembre, cuando a él lo enlazan desde su prisión en Arizona para una audiencia. Yo le comento la situación que se dio en horas de la mañana (el anuncio del diálogo entre gobierno y Farc) y él se muestra muy contento de esa designación emblemática por parte de sus compañeros para que haga parte de la mesa de negociación.

A él lo toma pro sorpresa pero se pone muy contento. Ahí me manifiesta que por favor le comunique al Gobierno Nacional que él estaría en completa disposición de hacer parte de la mesa de negociación. Esa noticia es la primera noticia que tiene sobre este importante evento, desde su sitio de reclusión.


CC: ¿Ha vuelto a hablar con ´Simón Trinidad’?

OSD: No, no ha habido oportunidad de hablar a pesar de que él volvió a decir, a través de una comunicación oficial, que está dispuesto a colaborar con este proceso de diálogo. A mí me ha sido imposible asistir a las audiencias públicas.


CC: La ministra de Justicia afirmó que la posibilidad de que ‘Simón Trinidad’ participe en la mesa de negociación es posible, ¿usted qué opina?


OSD: Yo tengo el más alto concepto de la ministra, creo que es una persona muy inteligente. Si refirió esta situación es en la órbita de su ámbito estrictamente personal por cuanto eso estaría en criterio del Presidente de la República.

Tanto el Fiscal General, como ahora la ministra, le están dando soluciones a los problemas. Y no están buscando problemas a las soluciones. Efectivamente se ha dicho que él podría estar en la mesa de negociación de forma virtual, y eso es una posibilidad y una buena solución al requerimiento de las Farc.

La presencia física de ‘Simón Trinidad’ en la mesa de negociación tampoco es imposible. El gobierno de Estados Unidos no ha dicho que no se puede hacer así que necesitaríamos que ellos dijeran concreta y oficialmente su posición frente a la presencia de él en Oslo o en La Habana.

Para mí la posibilidad es viable y la postura de la ministra de Justicia es absolutamente lógica y coherente.


CC: ¿Qué tendría que hacer el gobierno norteamericano para permitir que su defendido pueda participar en los diálogos?


OSD: Tendría que tener voluntad política. Se tendría que desarrollar, si es una presencia virtual, a través de un mecanismo tecnológico que esté en Oslo y en la cárcel en Arizona, donde está el señor ‘Trinidad’.

Lo que yo veo imposible es que a ‘Simón Trinidad’ se le hagan llegar los documentos necesarios para que él pueda emitir algún concepto en el marco de este diálogo y esta negociación.

El gobierno de los Estados Unidos tendría que viabilizar esa dinámica para permitir que él pueda tener acceso a los documentos, y mientras no exista una postura clara de este país frente al caso de mi defendido, es muy difícil que haya algún avance.


CC: ¿‘Simón Trinidad’ preferiría hacerlo de manera virtual o viajar a las negociaciones?


OSD: Él no se negaría ninguna posibilidad. Desde el mismo 6 de septiembre me comentó de su enorme disposición para hacer parte de este proceso de solución del conflicto armado en el país.


CC: ¿Cómo ve usted la eventual participación política de miembros de las Farc, si prospera el acuerdo con el gobierno?


OSD: Eso sería tener una visión muy anticipada. En este momento hacemos augurios porque en la mesa de negociación esté conformada por miembros de las Farc y del gobierno nacional así que sería muy prematuro de mi parte referirme a ese tema de la participación política y sería mejor ir paso a paso.

En el Cagúan había muchas conjeturas y vea lo que sucedió.


CC: ¿Cuál sería el aporte fundamental de ‘Simón Trinidad’ a la mesa de diálogo, si logra hacer parte de ella?


OSD: Como el país, sabe, mi defendido es economista de profesión y en el tiempo que estuvo recluido en la cárcel de Cómbita pidió informes de universidades públicas y privadas sobre todo lo que tiene que ver con el campo y del agro en el país. Esos documentos se le hicieron llegar y él los estudió.

Creo que es una persona que conoce el tema del agro de manera suficiente. ‘Trinidad’ conoce cuántas hectáreas libres están para realizar una eventual reforma agraria y puede hablar con pleno conocimiento del tema de sustitución de cultivos y de formalización de la productividad en el campo.


Los procesos contra ‘Trinidad’


CC: ¿Cómo son estas audiencias públicas en las que participa su defendido?


OSD: El sistema de audiencias se lleva por cumplimiento de una acción de tutela que yo presenté a nombre de ‘Simón Trinidad’ en la que le decía al gobierno que, a pesar de que había preferido extraditarlo, se le permitiera ejercer en todos los procesos el derecho a su defensa material.

‘Simón Trinidad’ ha querido tener una participación muy activa en los diferentes procesos que se llevan. El gobierno tiene el compromiso de enlazarlo a todas las acusaciones que le ha formulado la Fiscalía a través de un sistema de videoconferencia. Ahí estamos tratando de cumplir en todos los procesos porque la Ley 600 eliminó la acumulación de este tipo de diligencias.

El gobierno ha sancionado una ley que le permite a ‘Simón Trinidad’ y a los demás extraditados acogerse al principio de oportunidad para eliminar algunos procesos en su contra. Sin embargo, la Fiscalía me comentó que esa ley no se podía aplicar de manera retroactiva. La idea era generar un ambiente de laxitud al mismo gobierno a través del ente de control para que no siguiera adelantando esos procesos.


CC: ¿Cuántos procesos tiene en su contra ‘Simón Trinidad’?


OSD: Él tiene alrededor de 30 procesos acá en Colombia.


CC: ¿Por qué delitos?


OSD: Ahí hay un inconveniente: al señor ‘Trinidad’ en el lanzamiento del Movimiento Bolivariano, se le menciona como miembro del Estado Mayor Central de las Farc. El video fue consultado por varios expertos en Estados Unidos, que afirmaron que este material audiovisual había sido editado y que no correspondía a un producto fidedigno.

Los fiscales en Colombia siguen avalando la veracidad del video, lo que quiere decir que si en el lanzamiento del MB se dice que él es miembro del Estado Mayor Central, todos los hechos atroces que se le atribuyen a la estructura de las Farc serían también responsabilidad de ‘Simón Trinidad’, por ser miembros de esta cúpula.

Hemos venido desvirtuando estas versiones y algunos jueces de la República le han dado aval a la edición del video y han proferido sentencias absolutorias a favor de ‘Trinidad’.

CC: Ustedes están tratando de comprobar que él no es miembro del Estado Mayor Central de las Farc…


OSD: La Fiscalía ha querido magnificar que él sí es miembro de esta estructura de las Farc a través de ese video. Pero en Estados Unidos, después de establecer que ese material fue editado, se concluye que ‘Simón Trinidad’ no fue miembro del Estado Mayor Central de las Farc.

Si públicamente los miembros del secretariado o del EMC concluyen que él no es miembro, pues no lo es. En las órdenes de batalla de los organismos del Estado se establece que no pertenece a esta estructura, no es un capricho nuestro decir esa afirmación sino constatar que ha habido una manipulación de ese video. Que la Fiscalía siga concluyendo que ‘Simón Trinidad’ es miembros del Estado Mayor Central resulta perverso.


CC: ¿Los procesos que él tiene son derivados de su pertenencia a esta estructura de las Farc?


OSD: ‘Simón Trinidad’ también está condenado por delitos que cometió como comandante del bloque que opera en el Cesar, creo que es el 57. En esas si tiene sindicaciones directas en las tomas a los diferentes municipios, que sucedieron hace más de 10 años.


CC: ¿Qué significaría para ‘Simón Trinidad’ que la justicia colombiana afirmara que él no es miembro de esa estructura?


OSD: Ya lo han venido reconociendo algunos jueces de la República, y si la justicia en pleno concluye lo mismo, él no tendría que responder por los delitos que ordenaron otros miembros de esta estructura.

Es una cuestión formal, ‘Simón Trinidad’ se encuentra condenado acá en Colombia por el secuestro del exalcalde de Valledupar, Elías Ochoa Daza, entonces no habría ninguna implicación en cuanto a rebaja de penas.

Lo que queremos es hacer el ejercicio del derecho a la contradicción para hacerle caer en cuenta a la Fiscalía que mi defendido no es un miembro del Estado Mayor Central de las Farc.