A través del programa “con educación escribiremos la historia de la Paz”, el Gobierno está entregando a niños de colegios públicos, el esfero con el que posiblemente, se firmará el documento en el que las FARC y el Estado pacten el fin de un conflicto de 50 años.
Según el Ministerio de Educación, el ‘Balígrafo’ de la paz es el símbolo que representa la tranformación de los elementos que un día sirvieron a la guerra, y que ahora educarán para la paz.
Frente a esta estrategia de pedagogía, hay que recordar, que el Gobierno se comprometió con el país a firmar un acuerdo definitivo con las FARC, el próximo 23 de marzo a más tardar.
La ministra de Educación, Gina Parody señaló que, “Colombia vivirá la transición en pocos meses, de un país donde las balas serán el pasado y la educación se convertirá en el presente y el futuro”.
El Gobierno ha reiterado que la educación será el legado más valioso que podrá dejarles a las nuevas generaciones. Desde las aulas de clase, será donde comience a reescribirse la historia de una Colombia en paz.
Por eso, recordó que este año se destinaron más recursos para la educación. De los 215,9 billones de pesos del presupuesto nacional para 2016, 31 billones serán para políticas educativas y 30 billones para defensa.
“Después de casi 60 años de guerra en Colombia, por primera vez, un gobierno asignó más presupuesto para la educación que para tanques, fusiles y balas”, señaló Parody.
“Éste Balígrafo está siendo entregado a niños de colegios públicos. Las plumas más grandes del país escribirán cómo va a ser una Colombia en paz, y los más pequeños la dibujarán”.
Sin embargo, el esfero también ha sido entregado a personajes de la opinión pública como al caricaturista Vladdo, Mario Mendoza, Juan Gossaín, Melba Escobar, Celso Román y Pilar Lozano para que con él escriban su visión “de una Colombia en paz”.
Finalmente, Parody dijo que esta pluma simbólica “ayudará a marcar el comienzo de la primera generación que no tendrá que vivir un solo día en Guerra: la generación de la paz. Con el silencio de los fusiles, Colombia podrá pasar la página y empezará a escribir el capítulo de la paz, la equidad y la educación”.