El mismo cuento de siempre para Millonarios

Parecía la noche indicada para que Millonarios dijera presente en la Liga contra un rival directo por el campeonato. Los embajadores recibían a los verdolagas en el Campín, lugar que había sido un fortín hasta la fecha para los azules. El invicto se cayó en el minuto 87, con el tanto de Aldo Leao Ramírez. Los locales habían hecho méritos hasta entonces para llevarse el partido. El medio campo de Nacional no estuvo presente hasta el último periodo del encuentro, y sin embargo fue suficiente para decantar el partido.

En el Campín se quedaron con cara perpleja. El partido se les escapó de las manos y entregaron los tres puntos por un despiste casi con el tiempo cumplido. Nacional no ganaba desde hace tres años en Bogotá y recuperó la senda de la victoria repitiendo el clásico cuento que se ha vuelto una costumbre en Millonarios. Jugó para merecer más, pero cayó como siempre.

Los embajadores se habían mostrado firmes hasta la fecha en su casa, mostrando fácilmente el mejor fútbol de lo que se ha visto en el campeonato. La banda izquierda, compuesta por Quiñones y Machado, volvió a ser un torbellino. Por ese costado llegaron las mejores ocasiones para los azules. Pero no concretaron y quien perdona…

La derrota, aunque sea por la mínima, deja muy tocado a Millonarios. Más allá de los tres puntos, claves para la tabla, el partido se antojaba como una piedra de toque perfecta para medir las aspiraciones de los de Russo en la presente campaña. Mostraron argumentos pero el desenlace fue negativo. La buenas sensaciones que dejaron los dos clásicos previos, contra América y Santa Fe, se fueron de un plumazo con la derrota ante Nacional. Russo tendrá que recuperar la autoestima del grupo, aún queda mucho campeonato y se debe sacar los aspectos positivos para seguir creciendo en el plan de juego.