Mientras las víctimas mortales llegan a más de 5.000, María Ángel Holguín, canciller colombiana confirmó este martes que son más de treinta los colombianos los afectados por el terremoto del pasado fin de semana. En este momento el mayor problema que enfrentan los damnificados. que superan los 8 millones, es la falta de provisiones como agua y comida. [Foto y Video]
De acuerdo con información oficial, los colombianos ya han sido localizados y se encuentran en buen estado de salud. Sin embargo sólo se tiene contacto con 32 connacionales, pues hay 3 que están ubicados en la zona montañosa de Nepal.
Uno de esos colombianos es Miguel Camelo, quien tras el fuerte terremoto logró comunicarse en la madrugada de este domingo con un familiar en Estados Unidos para dar con su ubicación.
En ese sentido el gobierno colombiano aseguró que el cónsul honorario en Katmandú, Santiago Arrubla, así como el cuerpo consular del país, están al tanto de los connacionales que deseen ser evacuados.
“En el caso de los colombianos en zona montañosa ahí nosotros no podemos hacer nada distinto a pedir al gobierno de Nepal y a los gobiernos que están haciendo la evacuación por helicóptero de las personas que quedaron allá detenidas. De las demás personas estamos tratando hacer la evacuación, hay 10 personas que no quieren salir de Nepal y hay 8 que estamos en esa evacuación”, dijo la ministra.
Desde el momento en que se conoció esta tragedia la Cancillería Colombiana activó un plan de contingencia para mantener enteradas a las familias de las personas que se encontraban en Nepal en el momento del terremoto.
Muchos habitantes de Katmandú empezaron un éxodo, mientras Naciones Unidas prepara una operación humanitaria para mitigar la falta de comida y de agua.
Familias enteras se agolpaban desde ayer en buses, algunas personas incluso viajaban en el techo de los atestados vehículos. Muchos habitantes también emprendieron el viaje para llegar a sus pueblos natales y determinar la magnitud del desastre allí.
Este éxodo comienza en un momento en que los equipos internacionales con perros entrenados, maquinaria pesada para remover los escombros y provisiones lograron llegar al país.
Los hechos
Un terremoto de magnitud 7,8 sacudió la mañana de este sábado a Nepal. Ya son más de dos mil las personas que han muerto a causa del violento sismo, así lo ha indicado un vocero del Ministerio de Asuntos Internos del país asiático.
Dado que las labores de rescate se encuentran todavía en sus primeras etapas y que la gente en las zonas periféricas pueden haber sido afectados, parece probable que el número seguirá aumentando.
Edificios históricos en Katmandú yacían entre los escombros en el suelo. Los heridos están siendo atendidos afuera de los hospitales en medio de escenas caóticas. Los residentes, aterrorizados por una serie interminable de réplicas, permanecían acurrucados al aire libre.
Se reportaron avalanchas en el monte Everest. Hasta el momento el Ministerio de Turismo de Nepal sólo ha podido confirmar 10 muertes en el campamento base, pero el portavoz Gyanendra Shrestha dijo que la cifra de fallecidos podría aumentar.
Agregó que dos tiendas de campaña en el campamento atendían a los heridos. Funcionarios del ministerio estimaron que al menos 1.000 montañistas, incluyendo unos 400 extranjeros, estaban en el campamento base o en el Everest cuando ocurrió el terremoto.
Hay que anotar que abril es uno de los meses más populares para escalar el Everest, de 8.850 metros y el más alto del mundo, antes de que la lluvia y las nubes oculten los Himalayas a fines del mes próximo.
El montañista Alex Gavan tuiteó: “Gran terremoto en campo base del Everest y luego una gran avalancha. Corrí por mi vida. Ileso. Muchas personas en la montaña”.
El temblor, que golpeó en horas de la mañanal, ocurrió a una profundidad de 15 kilómetros, que es considerada superficial y más dañina que la de un temblor con epicentro a mayor profundidad. Personas en el área reportaron que el temblor duró mucho tiempo. Una persona dijo que sintió como si estuviera en un barco en medio de una tormenta.
Al menos 15 réplicas con magnitud de 4.5 grados y de hasta 6.6 grados han sacudido la zona montañosa del país, según el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS, por sus siglas en inglés).
“Estamos asustados y esperando que terminene los temblores”, dijo Shiwani Neupane en Facebook. “Estamos todos sentados afuera porque hay noticias de que habrá más temblores”.
“No hay electricidad y las familias están escuchando la radio FM adentro de sus carros”, dijo Neupane. “Noticias de múltiples edificios colapsados. He visto muchas paredes rotas, y carreteras y edificios. El Dahara estaba lleno de gente hace un rato. Hay policías por todos lados, tratando de mover los escombros para hacer espacio en el camino para las ambulancias. Todo el mundo está muy asustado”.
Las autoridades nepalíes calificaron los daños de severos y dijeron que los mismos no se limitaban a la zona del epicentro.
“Vamos a necesitar del apoyo de varias agencias internacionales con más experiencia para atender el tipo de emergencia que estamos enfrentando”, le dijo a la cadena de noticias BBC, el ministro de Información, Minendra Rija.
En la capital varios edificios –incluyendo la emblemática torre Dharahara– fueron reducidos a escombros, atrapando a numerosas personas.
