El contratista Emilio Tapia, involucrado en el ‘carrusel de la contratación’ en Bogotá, fue cobijado con la medida de aseguramiento e irá a la cárcel la Picota. Durante la imputación de cargos en su contra, el empresario, aceptó el cargo de concierto para delinquir.
Tapia fue llevado al centro penitenciario en Bogotá, luego de que la juez 60 de control de garantías cobijó con medida de aseguramiento en centro carcelario, por haber actuado de intermediario entre la Administración Distrital y el Grupo Nule en las obras que ejecutaron en la capital.
Aunque el fiscal delegado solicitó ante la Corte Suprema de Justicia que Tapia fuera cobijado con medida de aseguramiento “no privativa de la libertad”, la Juez determinó que deberá permanecer en la cárcel La Picota de Bogotá.
Aunque el pasado jueves Tapia aceptó el cargo por concierto para delinquir, se declaró inocente de los delitos de cohecho e interés indebido en la celebración de contratos.
Emilio Tapia, hace parte del grupo de sindicados en el desfalco por las obras en la capital, en el que también se encuentran Samuel Moreno Rojas, exalcalde de Bogotá, algunos excongresistas, exfuncionarios del IDU y de la Alcaldía de Bogotá.
