La Asociación Nacional de Industriales (ANDI), reveló que es muy compleja la situación de la manufactura tras los datos arrojados por la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta en el tercer trimestre del año.
En ese estudio se experimentan bajos crecimientos en producción y ventas pese a que se mantiene la utilización de la capacidad instalada de las factorías e 78,1 por ciento.
Las directivas del gremio aseguran que el entorno para los negocios ya muestra signos de deterioro, situación que a su juicio se produce por la incertidumbre internacional de los mercados. Todo lo anterior golpea el empleo que se vio impactado en el periodo julio-septiembre cuando decreció según el DANE en -0,5 por ciento. Los empresarios precisan que si bien el año venía con alguna dinámica, en los últimos meses las cosas dieron un giro, generando la correspondiente preocupación.
Para la ANDI el panorama hizo que fuera perentorio monitorear todos los factores que impactan la competitividad y que van desde que acontece al interior de las empresas hasta frentes exógenos y de entorno productivo, incluyendo vías y logística. Los industriales precisan que es perentorio trabajar sobre una consecuente agenda de competitividad.
En consideración de la ANDI, los favorables resultados en inflación le dan espacio a la Junta Directiva del Banco de la República para aplicar una reducción adicional en los tipos de interés.
“En lo cambiario no podemos olvidar el impacto desfavorable que ha tenido la revaluación sobre las exportaciones y los bienes que compiten con las importaciones. Aquí también conviene un análisis juicioso de las herramientas con las que cuentan las autoridades económicas. Y, no menos importante en la Agenda de Competitividad están aspectos como la infraestructura, los reglamentos técnicos, el fortalecimiento institucional, los costos de energía y gas, los costos logísticos, la educación, el mercado de capitales y el aprovechamiento de los Tratados de Libre Comercio, entre otros”, anotó el gremio de los industriales.
Producción y Ventas
Al revisar la Encuesta de Opinión Industrial Conjunta (EOIC), que la ANDI realiza con ACICAM, ACOPLASTICOS, ANDIGRAF, ANFALIT, CAMACOL y la Cámara Colombiana del Libro, es visible que en el período enero-septiembre de 2012, comparado con el mismo período de 2011, la producción aumentó 1.5 por ciento, las ventas totales 3.1 por ciento y, dentro de éstas, las ventas hacia el mercado interno crecieron 1.6 por ciento.
Para los empresarios, es importante tener en cuenta que este resultado en lo corrido del año se ve afectado negativamente por el mantenimiento en la refinería de Barrancabermeja (Ecopetrol) a principios del 2012. “Aislando esta situación del comportamiento del resto de la industria manufacturera, los resultados de producción y ventas ascienden a 1.9 por ciento y 3.4 por ciento respectivamente”.
Saldos en rojo
Mirando el cuadro de comportamiento sectorial es preocupante la cantidad de cifras en rojo, pareciera como si acudiéramos a la entrega de notas de un pésimo estudiante que reprobó la mayoría de sus asignaturas.
En materia de producción los perores comportamientos son para vehículos con una variable negativa de 16,5 por ciento, le siguen autopartes con -14,6 por ciento, hilatura, tejedura y acabados -6,6 por ciento, y refinación de petróleo con -4,1 por ciento. Están en rojo de igual manera calzado, bebidas, actividades de impresión y sustancias químicas básicas. Por el contrario les va bien a aparatos de uso doméstico con 22,0, hierro, acero y fundición de metales con 19,0 por ciento y a sectores o industrias como alimentos, papel y cartón y productos minerales no metálicos entre otros.
Lo atinente a Ventas totales deja muy mal el sector de vehículos con una caída de -15.2 por ciento, seguida de autopartes con -11,5 por ciento.
Los indicadores de demanda es decir inventarios y pedidos, si bien se mantienen por encima del promedio histórico, reflejan una tendencia desfavorable en los últimos meses. En efecto, el 82.6 por ciento de la producción calificó sus pedidos como altos o normales, frente a un indicador superior al 90 por ciento a principios del año. Por su parte, el porcentaje de la producción que califica sus inventarios como altos fue de 22.2 por ciento.
Los principales obstáculos que perciben los empresarios en el desarrollo normal de su actividad son la baja demanda, costo y suministro de materias primas, alta competencia en el mercado, tipo de cambio, contrabando, bajos márgenes de rentabilidad, baja rotación de la cartera, infraestructura y costos logísticos como también los factores climáticos.
Los industriales ven grandes dificultades con los costos logísticos que golpean la competitividad así como la falta de carreteras e infraestructura en general que castiga cualquier buen desempeño al interior de las fábricas.