Las enfermedades más comunes producidas por la mala higiene bucal son la caries dental, la inflamación de encías, y la periodontitis. Esto se debe muchas veces al descuido por parte de algunos padres hacia la salud bucal de sus hijos.
Gonzalo Herrera, padre de dos niños, cree que los dientes de leche no requieren cuidado especial, puesto que con el pasar del tiempo se caerán y nacerán otros nuevos que sí necesitarán de algún tipo de tratamiento.
Sin embargo, este es un pensamiento erróneo. Johana Cotes, odontóloga, refuta esta opinión y dice: “los dientes de leche con mayor razón requieren de cuidado y tratamiento especial, pues de lo contrario generaran dolor y abscesos”. Para evitar enfermedades y consecuencias a largo plazo, la higiene tanto para niños como adultos debe ser habitual e impecable.
Por otro lado, hay quienes por temor o simple despreocupación no visitan el odontólogo y con el tiempo hasta pierden sus dientes. La odontóloga Patricia Vargas cuenta cómo por el mal cepillado las bacterias poco a poco se van acumulando, volviéndose tan fuertes como una piedra; esta placa se come el hueso, lo que técnicamente se conoce como periodontitis, y causa la pérdida de los dientes.
Consecuentemente, el problema aumenta, ya que la placa bacteriana provoca olores muy desagradables emitidos por la cavidad oral, lo que para muchos es la raíz de un gran problema de autoestima.
Aunque no todos los casos son iguales, pues según Oscar Melo, médico general: “personas con enfermedades intestinales y estomacales, con problemas del hígado o gastritis, aun teniendo una excelente higiene pueden padecer de halitosis, o lo que comúnmente llamamos como mal aliento”. De igual forma, personas con amigdalitis o sinusitis pueden ser afectadas por malos olores bucales.
Por otro lado, Damaris Molina, odontóloga, asegura que una dentadura alineada puede evitar la acumulación de residuos entre los dientes y cálculo dental, que son los principales factores creadores del mal aliento. Igualmente, para quienes se encuentran en algún tipo de tratamiento de ortodoncia, es conveniente saber que los brackets retienen bastante placa bacteriana, por lo cual la higiene en estas personas debe ser perfecta.
Y para lograr esto, Julio Huertas, higienista oral, dice: “lo ideal es visitar el odontólogo mínimo cada seis meses, ya que en este periodo de tiempo es necesario realizarse una limpieza para erradicar los cálculos que se crean”. Ante esto, la odontóloga Vargas agrega que todos los seres humanos tenemos cálculos, sin importar edades.
Para prevenir cualquier tipo de enfermedad generada por la mala higiene oral, según aconseja Huertas, es necesario lavarse los dientes después de cada comida; primero sin crema dental por unos segundos, y luego sí aplicar el dentífrico volviendo a cepillar. Asimismo, es fundamental usar seda dental 3 veces al día. Igualmente, se debe utilizar enjuague bucal sin alcohol, ya que este puede irritar las encías. Es importante mencionar que ningún enjuague es apto para digerirlo; por ello, hay que supervisar a los niños en el uso de este contenido.
Adicionalmente, hay que hacer uso de un cepillo que no genere molestia en encías, o sangrados en las mismas; aquellos de término medio pueden ser recomendables para tener una buena técnica de cepillado sin lastimar encías. No hay que olvidar que cada tres meses se debe cambiar el cepillo de dientes para evitar enfermedades periodentales.
Finalmente, Gustavo Rendón, medico nutricionista, recomienda ingerir alimentos ricos en calcio, flúor, fósforo, al igual que vitaminas A, B y D, para obtener una salud bucodental adecuada. Del mismo modo, para mantener unos dientes blancos hay que evitar las bebidas oscuras, el cigarrillo y el curry.
Además, los almidones de algunos alimentos, gaseosas y azúcares colaboran a la creación de placa bacteriana, la cual deteriora y acaba el esmalte dental. De igual manera, las bebidas ácidas pueden ser perjudiciales para cualquier dentadura. Lo que aconsejan los odontólogos entrevistados es lavarse los dientes al poco tiempo de ingerir dichos alimentos.