Se trata de Mohamed Fouad-Aggad, un joven de 23 años originario de Estrasburgo que en 2013 viajó a Siria junto a su hermano y varios amigos para unirse al ISIS.
El tercero de los terroristas que cometió la masacre de la sala de conciertos Bataclan durante los atentados de París del pasado 13 de noviembre ha sido identificado. Se trata de Mohamed Fouad-Aggad, un joven de 23 años originario de Estrasburgo que en 2013 viajó a a Siria junto a su hermano y a varios amigos para unirse al ISIS.
Según ha informado la emisora France Info, los investigadores creen que Fouad-Aggad fue captado por Mourad Farès, conocido por reclutar yihadistas en Francia. “Formaba parte de un grupo de diez jóvenes radicalizados que dejó el barrio de Meinau de Estrasburgo en diciembre de 2013”, apunta el diario francés ‘Le Parisien’, que señala que varios de los amigos con los que viajó a Siria fueron detenidos en la primavera de 2014 en Francia por “asociación a banda terrorista” mientras Fouad-Aggad aún seguía allí.
Dos de los amigos de Mohamed Fouad-Aggad fallecieron en Siria a las pocas semanas de su llegada mientras que al menos siete de ellos regresaron a Francia entre febrero y marzo de 2014.
El pasado 13 de noviembre y durante dos horas y media, tres hombres irrumpieron en la sala Bataclan armados con sus Kalachnikov abriendo fuego contra los asistentes a fuego contra los espectadores del concierto de Eagls Of Death Metal matando a 89 personas e hiriendo a más de dos centenares. Tras cometer la matanza, los tres activaron sus chalecos explosivos.
Los otros dos, también franceses
Uno de los kamikazes era Sami Amimour, nacido el 15 de octubre de 1987 en París, y de nacionalidad francesa. La justicia francesa había emitido una orden de arresto internacional contra Amimour por haber violado su control judicial al que estaba sometido por un viaje a Siria en septiembre de 2013.
El otro era Ismail Omar Mostefai, también francés nacido hace 29 años en Courcouronnes, al sureste de París, condenado por ocho delitos menores -entre ellos posesión de estupefacientes- entre 2004 y 2010. Desde ese último año estaba fichado por los servicios secretos como posible radical islámico.
