Con la recuperación de todos los efectivos que estaban en la enfermería, el debate que se ha instalado en el Real Madrid es el que engloba a James Rodríguez e Isco Alarcón. Parece claro que, salvo eventualidades, solo hay un hueco que se rifan los dos. Hay partidarios de uno y otro bando, pero en el seno del vestuario blanco podría haber menos dudas.
Cuenta El País que James Rodríguez es el favorito claro de Carlo Ancelotti. Para el entrenador italiano, el ’10’ se adecúa más al perfil de jugador que necesita para sus 4-3-3. Su mayor rapidez a la hora de tocar el balón y su sentido del orden táctico cuando toca hacer tareas defensivas le ponen en el primer lugar de Carletto. Pero no solo de él.
Porque Cristiano Ronaldo (que por su condición de estrella del equipo tiene una opinión a tener muy en cuenta) tiene el mismo pensamiento sobre la solución al dilema que tenía Ancelotti. Las razones esgrimidas son las mismas, y no se trata solamente del portugués. Sergio Ramos y buena parte del vestuario piensa igual.
Esto no significa en ningún caso un ataque a Isco, ni mucho menos. Solo se refleja un mayor gusto por cómo hace el colombiano su trabajo. Siempre a uno o dos toques, da continuidad a la rapidez de las jugadas y no se desconcentra en tareas defensivas. Isco dio el paso en ese sentido, gesto valorado por Ancelotti, pero sigue siendo más lento a la hora de que fluyan los ataques rápidos, lo que en muchos casos resta espacios a los delanteros al dar tiempo a los defensas rivales a ordenarse.
La creencia común es que el gran jugador que es Isco rendiría más en un sistema con un mediapunta puro. Ahí, Isco jugaría en su posición natural y no como un volante adaptado (de forma óptima). De hecho, Ancelotti cree que podría ser el mejor jugador del mundo en ese puesto concreto.
La labor del malagueño durante los últimos meses ha sido encomiable, vital para el Real Madrid. Junto a Marcelo, ha sostenido al conjunto justo cuando peor estaba el bloque. En la temporada de su confirmación absoluta, aun así, no le bastaría. La vuelta de James parece dejarle de nuevo, como teórico suplente, por expreso deseo de Ancelotti y de varios de los pesos pesados.