¿Por qué el músico colombiano está vendiendo sus guitarras?
Cuando instrumentos musicales y letras se funden para producir obras de arte que se hacen canciones, todo puede pasar. Si a ello se le suma la plástica se traducen en ideas inspiradoras. Es lo que sucederá en Art Guitar, una iniciativa de la Fundación Mi Sangre en la que el próximo 16 de diciembre en Bogotá se presentarán 30 guitarras intervenidas por 30 artistas diferentes.
Ese día, pintura, escultura y todas las expresiones posibles del arte se conjugarán en un solo instrumento para tocar la conciencia y promover la transformación social, a través de un evento al que asistirán líderes de opinión, artistas de arte, amigos y medios de comunicación convocados por la fundación que lidera Juan Esteban Aristizábal, Juanes.
Cada instrumento pinta mundos en donde los cantos no son para oír sino para ver, unos más surrealistas que otros, pero todos con el propósito de sonar en el pensamiento y en el corazón.
Cada una de las 30 guitarras donadas por Yamaha tuvo una intervención artística gracias al trabajo y compromiso asumido por reconocidos artistas plásticos y se venderán, a 25 millones de pesos cada una, con el propósito de recaudar fondos que que la Fundación Mi Sangre destinará al trabajo social que realiza.
Nombres como los de Alfonso Ariza, Andrés Matías Pinilla, Carlos Blanco, Carlos Jacanamijoy, Carolina Convers, Cristóbal Gaviria, Diana Drews, Diego Mazuera, Elsa Zambrano, Germán Londoño, Guillermo Londoño, Gustavo Vejarano, Javier Vanegas, Luis Luna, Nadín Ospina, Pedro Ruiz, Pilar Copete, Santiago Cárdenas y Hugo Zapata, están en la lista de quienes tocaron las guitarras con su arte.
Junto a ellos también están músicos y cantantes como Tony Bennett, Juan Luis Guerra, Carlos Vives, J. Balvin, Miguel Bosé, Fonseca y por supuesto Juanes. Y los reconocidos artistas cubanos Alexis Leyva Machado, Roberto Fabelo, Tomás Sánchez y José Bedía.
Los compradores, a la vez que adquirirán una obra de arte única, se convertirán en Constructores de PAZ al apoyar así la realización de proyectos en los que niños, niñas y jóvenes pueden convertirse en líderes de cambio en sus territorios. Además, cada uno recibirá un certificado de donación por la compra, en el que no está contemplado el valor simbólico de la obra del artista.
Acordes para construir una sociedad pacífica
“Mi guitarra es mi alma. Mi arma de Paz”, dice Juanes, fundador e inspirador de Fundación ‘Mi Sangre’.
Con esa claridad surge Art Guitar junto a la certeza de la Fundación Mi Sangre que ve en la música y todas las manifestaciones artísticas, herramientas que potencializan la creatividad, comunican el estado de la mente y el cuerpo, propician conexiones cerebrales que estimulan la empatía y el aprendizaje a través del juego y ayudan a construir nuevos imaginarios y roles de participación positiva.
El trabajo realizado a lo largo de nueve años permitió a la fundación comprobar que el arte y la lúdica son herramientas de transformación pedagógicas y lenguajes que causan gran impacto y despiertan habilidades sociales y emocionales que ayudan a niños y jóvenes a convertirse en líderes de cambio en su comunidad.
Por eso el evento del 16 de diciembre constituye una gran convocatoria para que empresarios, instituciones y personas del común sumen en el compromiso de ayudar a cerrar las heridas de la violencia y crear una cultura de paz y servirá, además, para que la fundación alcance sus objetivos de construir tejido social fortaleciendo sus proyectos para apoyar a niños, niñas y jóvenes afectados por la violencia y el conflicto.
“Esos fondos van dirigidos a cumplir con dos objetivos. Por un lado, apoyar nuestros programas de Acompañamiento Psicosocial a niños, niñas y adolescentes, y el Programa Educación para la Paz que adelanta la fundación a través de la música y la lúdica. El segundo objetivo es generar conciencia y sensibilidad frente a la problemática de la violencia y conocer las posibilidades que hay para transformar esa realidad”, explica Catalina Cock, Directora Ejecutiva de Fundación Mi Sangre.