Hernán Andrade Serrano, uno de los grandes barones políticos del departamento del Huila, empezó a caer desde el olimpo de la política nacional. Otro de los presidentes del Senado enredado en escándalos judiciales.
Andrade que se hiciera celebre por su participación en el fallido referendo reeleccionista fue investigado por la Procuraduría General de la Nación por ejercer, presuntamente, presiones indebidas a miembros de la Dirección Nacional de Estupefacientes para que le fueran cedidos algunos bienes incautados para encargarse de su administración.
Al parecer Andrade le habría ofrecido pago de comisiones a los funcionarios de la DNE, bajo la administración de Carlos Albornoz y Omar Figueroa, para que los bienes fueran entregados a familiares y amigos suyos.
Además, su nombre cobró especial relevancia después de que fueran encontrados dos pagarés firmados por él mismo, como garantía de un préstamo de 250 millones de pesos. Uno de ellos por 150 millones de pesos, y el otro, por 100 millones de pesos. Lo interesante de los pagarés es que fueron firmados apenas cinco días antes de las elecciones a congresista en las que Andrade salió elegido. Los prestamos fueron hechos por Armando Cabrera, uno de los cerebros detrás del desfalco a Cajanal.
Así las cosas, Andrade no es una persona alejada de los escándalos y ajena a los líos judiciales. Con su detención, otro de los expresidentes del Senado se suma a la lista de miembros de esa corporación que tienen una hoja de vida con algunos tachones y manchas.