El técnico portugués, con su pase a la última instancia de la Copa de la Liga, suma ya diez finales de Copa en toda su carrera. Es el torneo preferido del luso. En todos los equipos por los que ha pasado ha logrado conquistar este título. De vencer, repetiría la fórmula que tuvo en Madrid, Chelsea y Porto: ganar en su primer año la Copa de la Liga.
Mourinho va enderezando su camino en el United. Poco a poco va dejando atrás el nefasto inicio que ha tenido con los red devils -con números inferiores al United de Van Gaal y Moyes-. Con la Premier ya olvidada, se ha centrado en los tres títulos que les quedan en juego: Copa de la Liga, FA Cup y Europa League. De momento, ya han alcanzado la primera de las finales. Su derrota ayer contra el Hull City por la mínima, hizo valer el resultado de la ida para poder disputarse su primer título de la temporada.
Mou ha repetido la fórmula que ya tuvo en 2011 con el Real Madrid. En su primer año como técnico blanco, alcanzó la final de Copa que se jugó contra le Barcelona de Guardiola. Y se acabó llevando el épico partido que se disputó en Mestalla -uno de los más emocionantes que se recuerdan en España en la última década-. En el United ha copiado el plan de ruta, en su primer curso vuelve a pedir protagonismo con la final de Copa que se jugarán el 26 de febrero contra el Southampton.
En todos los equipos por los que ha pasado, logró levantar este título. Mou también sabe lo que es ganar la Copa de la liga de Inglaterra. Con el Chelsea llegó a conquistarla hasta tres veces, dos en su primera etapa y una en la segunda. Es un técnico que se siente a gusto en este torneo, es su terreno. Esta será la décima ocasión que llega a una final de Copa. Y su saldo es bastante positivo, tan solo dos derrotas -una con Porto y otra con Real-. Durante todos estos años como técnico, logró alcanzar la última instancia en 24 ocasiones. En 15 de ellas, se quedó por el título y acabo cediendo en las otras nueve.
Esta décima se la debe en gran parte al tanto milagroso que ayer logró Paul Pogba. Su apuesta más fuerte para el United, y que precisamente no está teniendo el rendimiento que se esperaba en esta campaña. El astro francés lo ha jugado casi todo con Mourinho en esta temporada, pero sus números no hacen justicia a los 120 millones que se pagaron por él -7 goles en 30 partidos-. Los azares del fútbol así lo decidieron y le brindaron la oportunidad al crack de reivindicarse, después de las duras críticas que ha recibido hasta el momento.