Pese a que Marta Lucía Ramírez no asistió a la audiencia instalada en el Consejo Nacional Electoral para determinar la legalidad de la convención que la eligió aspirante presidencial, y que tampoco lo hicieron Roberto Gerlein ni Efraín Cepeda, las defensas protagonizaron y la candidata salió favorecida e incluso respaldada por la Procuraduría,
A pesar de que no hubo pronunciamiento final por parte de los magistrados del Consejo Nacional Electoral -habrá que esperar- durante las cuatro horas de audiencia las versiones tuvieron lugar y la defensa de la candidata presidencial del Partido Conservador salió más que contenta.
En efecto, el anuncio de la procuradora delegada para asuntos electorales, Maria Eugenia Carreño, que sugiere negar la nulidad de la Convención Nacional del Partido Conservador, le dio la estocada decisiva al polémico novelón que mantiene los azules enfrentados, no obstante, aún resta que el CNE decida y emita declaración oficial al respecto.
Mientras tanto, Confidencial Colombia le cuenta los puntos álgidos de la audiencia a la que varios asistentes calificaron como “histórica”.
Sillas vacías de Roberto Gerlein y Efraín Cepeda
Los veteranos senadores no se presentaron y su inasistencia fue cuestionada por varios de los asistentes, pues era este evento el que decidía el futuro de la impugnación que los parlamentarios impulsaron con tanta insistencia.
En todo caso, el exmagistrado Guillermo Reyes, demandante en primera instancia, personificó jurídicamente las denuncias de los congresistas y lo hizo a entera cabalidad.
El jurista insistió en una ilegalidad del evento del 26 de enero, por tanto no se rectificó el quórum y por una ausencia de garantías en el uso de palabra legitimo del sector del conservatismo que quería una coalición.
En su intervención, Reyes presentó un video en donde se ve que el senador Gerlein es abucheado cuando pretendía exponer las virtudes de una alianza por encima del candidato propio.
“Se violó el uso de la palabra, se puede constatar una vez se adelantó en el cuarto punto (coalición)”, explicó. Asimismo señala que “no cuestiona la legalidad de la candidatura de Ramírez, sino la legalidad de la convención que la eligió”.
En seguida anunció la posibilidad de que lo expulsen del partido por el traslado de la impugnación, pero hizo hincapié en que nunca dejará de ser conservador y que actuó en derecho.
A su tuno, Carlos Julio Manzano, un convencionista y militante conservador que puso la segunda impugnación ante el CNE, afirmó que hubo ilegalidades durante el incidente con Gerlein. De hecho, dijo que el congresista fue amenazado junto a su esposa y que tuvieron que asistirla con la fuerza pública.
Pero Marta Lucía tampoco asistió
La candidata presidencial no estuvo presente, sin embargo su fórmula vicepresidencial, Camilo Gómez, quien también es miembro del quinteto de abogados de la aspirante, fue en representación. Pero la causa de dicha inasistencia no es ajena a polémicas.
Resulta que Ramírez se ausentó porque “no fue notificada” por el CNE sobre las impugnaciones en contra de la convención, precisó Gómez. Luego añadió que hubo una comunicación al respecto. Pero el magistrado ponente, José Joaquín vives, hizo énfasis en que la exministra de Defensa recibió su notificación cuando se envió el auto a la sede del conservatismo, partido en cuya junta directiva milita la candidata.
Tal y como Confidencial Colombia informó, existe una diferencia abismal entre comunicar y notificar. Este detalle jurídico habría sido causal suficiente para que Marta Lucía no asistiera. Vea las formalidades que tanto el CNE o la defensa estarían difuminando.
En añadidura, El Ministerio Público resolvió que la notificación respectiva no se hizo correctamente, pues en casos donde los derechos se ven vulnerados, es imperativo notificar personalmente a quien se ha demandado. Por tal razón, “no se dieron garantías plenas para que Marta Lucía ejerciera los poderes de interviniente directa (…) a esta altura tampoco pudo intervenir y solicitar las pruebas correspondientes y contradecirlas”, explicó Carreño.
¿Qué dijo la Procuraduría?
María Eugenia Carreño, procuradora delegada para asuntos electorales, esgrimió que la actuación administrativa se encuentra viciada de nulidad y que al Consejo Electoral le resulta “innegable el control de las partes”.
“El CNE parece confundir los conceptos relativos al simple acto administrativo con actuaciones administrativas sobre las quede debe recaer un pleno reconocimiento del debido proceso y del derecho a la defensa”, anotó.
Luego indica que no hubo garantías para la plena participación electoral de Marta Lucía, que se debe respetar el derecho al voto de los convencionistas y sugiere tumbar las dos impugnaciones –la de Reyes y la de Manzano- de manera que la candidata pueda ejecutar en pleno su aspiración presidencial.
Además, y en sintonía con el equipo jurídico de Ramírez, expone que la candidata y su fórmula vicepresidencial cuentan con el aval del partido y ya están inscritos en la Registraduría. Los anteriores, por ley, no se pueden revocar desde un organismo administrativo como el CNE.
Así las cosas, solicita a los magistrados del Consejo declarase “inhibidos” en el caso.
