La otra mujer en la mesa

En Colombia, país en el que las mujeres representan el 51 por ciento de la población total, ninguna de ellas hacía parte de la comisión negociadora del Gobierno en el proceso de paz. Sin embargo, la decisión del presidente Juan Manuel Santos de que Nigeria Rentería, Alta Consejera para la Equidad de la Mujer, reemplazará a Luis Carlos Villegas es una manera de darles voz a todas las mujeres que han sido víctimas del conflicto.

A pesar de que muchos medios han informado que Rentería llega a ser la primera mujer en la mesa de negociación, la comisión del Gobierno ya contaba con dos mujeres en el grupo secundario: la consejera presidencial Lucía Jaramillo Ayerbe y Elena Ambrosy. Por su parte, la comisión negociadora de las FARC cuenta con: Sandra Ramírez, la mujer de Manuel Marulanda Vélez, alias “Tirofijo”; “Victoria Sandino Palmera” o “Vicky”, cuyo verdadero nombre es Judith Simanca Herrera, integrante del Frente 21; y Tanja Nijmeijer, que irónicamente no es colombiana y ha tenido mayor relevancia que las negociadoras enviadas por el gobierno. Nijmeijer hace parte del grupo secundario de negociadores de las FARC.

Nigeria Rentería Lozano llega a la mesa con un amplio conocimiento en temas políticos y una extensa experiencia en el sector público. Rentería es abogada de la Universidad La Gran Colombia de Bogotá, especializada en Derecho Administrativo Contencioso de la Universidad Externado de Colombia y candidata a Magíster en Ciencias Políticas y liderazgo Democrático del Instituto de Altos Estudios Europeos. Rentería fue Oficial Mayor del Tribunal Contencioso Administrativo de Quibdó, Juez Segundo Administrativo de Quibdó. También se desempeñó como Secretaria de Gobierno de la Alcaldía de Quibdó entre los años 1999 y 2000, Secretaria General de la Alcaldía de Cali desde 2008 hasta 2011 y Asesora para la Mujer del municipio de Cali en este último año.

En el año 2012 ingresó al Instituto Colombiano de Bienestar Familiar (ICBF) como Asesora de Enfoque Diferencial de la Dirección General y Directora de la Regional Chocó. Posteriormente se desempeñó como Subdirectora Técnica para la Atención a la Familia y las Comunidades.

Las expectativas sobre el papel que desempeñará Rentería en la mesa de negociación no se han hecho esperar.

Ángela Cerón, directora de la Alianza Iniciativa de Mujeres Colombianas por la Paz (IMP), dijo que le parece importante que una mujer participe en el proceso de paz porque así se da cumplimiento a la Resolución 1325 del 2000 del Marco de Seguridad de las Naciones Unidas. En la Resolución se insta a las mujeres a participar activamente en los procesos de paz.

“Las mujeres no solo somos víctimas, también debemos ser protagonistas del proceso de paz”, afirmó Cerón.

Cerón destacó que la inclusión de Rentería en la mesa de negociación es un paso importante para cambiar la manera en la que las mujeres han sido vistas y tratadas.

“Incluir a una mujer en la mesa de negociación permite ver a las mujeres como sujetos demandantes de derecho. Es un cambio relevante porque las mujeres han sido vistas dentro de un marco de dependencia y vulnerabilidad”, aseguró Cerón.

Pese a las expectativas sobre el papel que Rentería puede llegar a desempeñar, Cerón dijo que es consciente de los límites que Rentería puede afrontar.

“A Rentería le deseamos los mejores éxitos, pero sabemos que ella va a representar los intereses del Gobierno”, dijo Cerón. “Sin embargo, ella tiene que cumplir con los acuerdos planteados en las recomendaciones de las comisiones internacionales en temas de paz y mujeres”.

“El papel de Rentería tiene que basarse en lo que ya está legalmente establecido en la Constitución de 1991 y en las recomendaciones internacionales”, agregó Cerón.

Marina Gallego Zapata, coordinadora nacional de la Ruta Pacifica de las Mujeres, afirmó que espera que Rentería pueda trabajar la agenda de las mujeres y así reivindicar el proceso, ya que se estaría firmando una paz incompleta sin se pierden los aportes de las mujeres.

“Es muy importante que se nombre a una mujer por parte del gobierno, ella debe trabajar para que las mujeres estemos mas involucradas en la negociación”, dijo Gallego.

Uno de los puntos centrales en los cuales a Gallego le gustaría que Rentería trabajara es la reinserción de las excombatientes.

“Ella [Rentería] deberá trabajar en una agenda que deje en mejores condiciones a las excombatientes para que se puedan reinsertar de manera más apropiada”, afirmó Gallego.

Tanto Cerón como Zapata coincidieron en que Rentería puede llegar a representar los intereses de las mujeres en la mesa de negociación. Aunque la participación de Rentería en el proceso de paz es vista como una buena noticia, Gallego y Cerón afirmaron que el proceso se debilita un poco sin la representación de los empresarios.