La Sagrada Familia

¿Cómo se le puede ocurrir a los engendros del mal de la Corte Constitucional que las parejas conformadas por personal del mismo sexo sí constituyen familia? Cuando lo que son es una caterva de locas y “butchs” (averigüen que es eso) empeñados en destruir los cimientos a la sociedad.

¡Lo sagrado, sagrado es! ¡Malnacidos, pirobos, bironchos, marimachas, alcahuetas!

Tenemos que presenciar con dolor como desde las gavetas y closets de la Corte, se desarchivan estos sodomitas encaletados en la rama de mis amores, para afrentar a la gente decente.

La tradición es clara. Las familias deben ser a imagen y semejanza de la Sagrada Familia, la auténtica, la de Nazaret, constituida por un hombre impotente, una mujer virgen y un hijo Dios.

¿O es que quisieran que el portal de Belén hubiera sido una porquería promiscua como el Portal Sur de Transmilenio? ¿Qué tal que el Niño Dios se hubiera formado en una “familia” constituida por un par de travestis o trans degenerados “Drag Queen”? En lugar de acabar el Señor dignamente en la Cruz, hubiera terminado clavado en Chapi-gay. En lugar de expulsar a los mercaderes del Templo le habría tocado entrarle a patadas al Gayrulla de la 63 en Bogotá. En lugar de andar por los olivares con María Magdalena, le habría tocado retozar con Juan por toda Galilea. En lugar de la multiplicación de los panes habría multiplicado condones y en vez de caminar sobre las aguas, hubiera desfilado en el demoniaco Carnaval de Barranquilla…

Dizque “una minoría social que se encuentra vulnerada”. Se trata más bien de una mayoría anti social, ya que investigaciones científicas (distintas a las calumnias de la doctora Lucía Nader y demás hampones de Todelar Noticias, encabezados por el tal Artunduaga que seguro fue transgénero en su provinciana mocedad huilense) van comprobando que en Colombia se trata de peligrosas mayorías, en virtud de numerosos y sucios genes regresivos de origen negroide, que han influido en el ADN mestizo y mulato y hecho que casi todo el populacho sea homosexual en potencia. Ojo gente de bien con muchachas del servicio, maestras, choferes, mensajeros y demás, detrás de los cuales se esconden urracas desviadas sexualmente que en cualquier momento pueden corromper y viciar las sanas relaciones de género en las cuales, como manda la ley divina, las mujeres se ponen en cuatro y los hombres las cargan cual becerras.

Las agresiones de las Cortes y demás “instituciones” contaminadas y envilecidas, ya son numerosas. Hay un complot contra la divina Procuraduría y su santidad Alejandro Ordóñez. No solo le quitaron cerca de mil puesticos con los cuales podía ayudar a cimentar su católica potestad y su futura campaña electoral: también le salen con esta porquería de defensa a la maricocracia y, de contera, me le han vuelto a instaurar la tal dosis mínima de droga. Como si fuera poco, no se pudo condenar al terrorista del Hollman Morris por haber traído el infierno al estadio El Campín, con la música irreverente del beatle Paul, uno de los fundadores de la decadencia occidental.

¿Se imaginan ustedes a todos los maricas militando en su causa y además alucinados? ¡Peligrosísimo! Y si a eso se une el condenable trabajo social de Petro en el Bronx, pues nos vamos a ver invadidos en los barrios del Norte de Bogotá de toda una panoplia de ratas y cucarachas trabadas y en calzones…

Alejandro, papacito, la lucha por la refundación arcaica de la patria continúa a pesar de estas batallas perdidas. Meta ya mijito a esos delincuentes de las Cortes en cintura, invéntese algo bien bueno para perseguirlos.

La Corte Constitucional ni siquiera respeta su propia y ladina Constitución, que en algún lado dice que la familia debe ser de hombre y mujer, sin variacioncitas de putos, putas e invertidos.

Insisto. Y lo peor es que puedan heredar. Seguro que como no pueden tener hijos, le van a heredar lo que les quede de su cochina vida a la FARRRRRR.

A esa gentuza no solo hay que discriminarla sino perseguirla. Por ejemplo, que la Fiscalía allane ya y ponga a buen recaudo a las viejas mañosas de la Escuela de Estudios de Género de la Universidad Nacional, que es uno de los lugares donde se esconden los autores intelectuales de esta campaña de poposearse sobre nuestra conservadora conciencia.

¡Detengamos esta afrente de una vez, o si no ved los grillos y las cadenas que os esperan, cuando la orquesta cachiporra del Congreso nos apruebe en su flaqueza, ni más ni menos que el apocalíptico matrimonio entre parejas del mismo sexo!

Muy bien que nuestra triunfante Iglesia Católica, que en estos momentos busca nuevo gerente de nuestra vaticana multinacional de la creencia y la fe, le haya salido al paso a las extralimitaciones de la Corte. Una “familia” no católica bien puede inclusive con el tiempo adoptar a peligrosísimos bebés hijos de desplazados o producto de violaciones. Seres que las leyes naturales deberían digamos… apartar de la vida.

Vamos de culo al estanque. Con esta jurisprudencia ponzoñosa, en no poco tiempo vamos a ver familias con varios papás y varias mamás: por ejemplo un núcleo familiar promiscuo en el cual estén dos lesbianas, dos maricas, tres putas, un travesti, una estrella porno y Daniel Samper Ospina, espantoso rey del mete saca.

¿Qué puede salir de una estirpe tan atroz? Pues la consolidación de las comunas hippies que logramos detener en los años 70. Una organización social que no respetará nada, dañada desde la almendra. Una descendencia sin linaje, una herencia maldita. Los institucionales conceptos de cuna, clan, club, casta, cepa, se habrán perdido y con ellos nuestro poder y nuestra prosapia ¡Subversivos!

De paso debemos aprovechar para quitarles todos los derechos que los comunistas le vienen dando a otras formas igual de malintencionadas de familia como la tal “madre cabeza de hogar” que no es nada distinto a darles beligerancia a las vagabundas. Van a querer, en su locura, que los solitarios o los viudos, también sean considerados como una “familia”.

Carajo. ¡A casarse todo el mundo, pero solo señores y hembras reproductoras, por ley de obligatorio cumplimiento! Y todo por la pendejada esa de la equidad y la igualdad, palabras que le brotan en la bemba de mulato al Armandito Benedetti, corroncho insoportable.

Hermanos godos: hagan algo ya, tómense el poder, Que el hermano lego Efraín Cepeda en nombre de la tradición restaure de una a Álvaro Uribe a la cabeza de la nación. Si el 20 de junio no se ha legislado, las parejas del mismo sexo podrán ir ante un notario y, con la misma solemnidad del matrimonio, establecer un vínculo, con consecuencias nefastas.

Acciones prontas y radicales antes de que esta vaina se nos llene de chavistas. ¿No han visto lo que está pasando allá? Se empieza por darles derechos y terminan por creerse dueños de lo que no es de ellos, sino de la Santa y Triple Alianza de Iglesia, banqueros y terratenientes.

Somos más que ellos, somos el conjunto cerrado de la sociedad (incluyendo, claro está, a los que tenemos históricamente tramados con ayuda del Canal Caracol).

Por estos motivos y para detener las avanzadas de la anarquía, es que hay que votar para el 2014 por un Pachito Santos ejemplo preclaro de la más equilibrada y católica de las familias: la familia política.