MSF ha atendido las mayores crisis humanitarias desde su fundación en 1971, hoy está en el epicentro del brote de Ébola que tiene en alerta al mundo entero. Confidencial Colombia habló con Jonathan Novoa presidente de la organización para América Latina.
Médicos sin fronteras es la ONG medico universitaria más grande del mundo, brinda asistencia médica a las poblaciones más necesitadas, se caracteriza por trabajar principalmente en dos ejes de intervención: desastres naturales y zonas de conflicto armado. Han estado presentes en las mayores crisis humanitarias que han venido sucediendo a lo largo de sus 42 años de historia.
Fue fundada en París en 1971 y su trabajo ha sido galardonado con premios tan importantes como el Príncipe de Asturias en 1991, el Premio Indira Gandhi en 1996 y en 1999 la organización alcanzó el premio Nobel de la paz.
Es la organización no gubernamental que más ha trabajado por la lucha contra el Ébola, enfermedad que no es nueva y que se dio por primera vez en 1976 en República del Congo y hasta ahora no se había desbordado como ha venido ocurriendo a lo largo de este año. MSF ya ha reportado a 16 de sus colaboradores infectados con la enfermedad y han confirmado 9 fallecidos por la causa.
¿Por qué después de tanto tiempo la enfermedad está cobrando tantas vidas? Jonathan Novoa, portavoz de MSF para América Latina de origen peruano, autoridad en medicina tropical y magister en salud pública internacional, responde esta y muchas preguntas más a propósito de la alarma que ha provocado la epidemia en el mundo.
¿Cuál ha sido el trabajo de MSF con el brote de Ébola?
En el caso particular del brote de Ébola MSF ha venido trabajando desde 1995 con la enfermedad que se ha dado principalmente en África Central, más exactamente en la República democrática del Congo hemos atendido también otro brote que se puede decir, es hermano del Ébola, el Marburg que tiene la misma sintomatología, el mismo modo de transfusión y la misma letalidad. Esto hace, diría sin temor a equivocarme, que MSF sea la organización que más experiencia tiene sobre la respuesta de Ébola en el mundo.
La particularidad de este brote es que no se había dado en esta parte del mundo y por lo tanto tomó a la población por sorpresa lo que hace mucho más difícil la respuesta porque si no conoces una enfermedad es difícil poder entenderla, reconocerla y responder adecuadamente a ella.
Otro factor importante es que la epidemia ha llegado a la zona urbana, la mayoría de casos en este momento se han dado en dos capitales Monrovia (Liberia) y Conakry (Guinea) lo que hace más difícil poder contenerla.
¿Cómo MSF identifica la enfermedad en África a principios de este año?
Normalmente cuando MSF sabe de esto es porque hay un evento inusual en una población específica, y es que la gente se empieza a enfermar de cosas atípicas como vómitos, diarreas y sangrado, sobre todo esto el hecho de que los pacientes empiezan a sangrar espontáneamente y comienza a fallecer uno y otro y otro, se prende la alarma en una población.
Hubo un llamado de las autoridades denunciado una serie de fallecimientos en la población de Guéckédou e inmediatamente se produce la respuesta de MSF que va y se da cuenta de que esta, es una fiebre hemorrágica de alta mortalidad, se envió una muestra a un instituto y ahí se confirmó que era Ébola.
En esos países está muy presente la fiebre de Lassa, entonces al principio se pensó que podía ser esta la enfermedad, pero al dar negativo se empezó a indagar en qué más podía ser y finalmente el diagnóstico del laboratorio fue este. En ese momento empezó la respuesta de MSF.
¿Cómo se financia MSF para lograr este trabajo?
Es la organización médico-universitaria financiada con fondos privados más grande del mundo, el 98% de nuestros recursos son donaciones privadas es decir gente del común u organizaciones que dona una suma de dinero que va entre 20 euros a millones de euros o dólares, recibimos muy poco dinero de los gobiernos. Son más o menos 2 millones y medio de donantes en el mundo que hacen su aporte voluntario cada año.
¿El personal que está en misión recibe alguna retribución económica?
Sí se recibe una pequeña retribución, sin embargo se considera un trabajo voluntario porque el primer año cuando alguien empieza a trabajar con MSF, hablando de personal internacional que sale de sus países a ayudar y a trabajar con la organización, es un año completamente voluntario.
Se financian los gastos de necesidades básicas con una cantidad muy baja de dinero y a lo largo de dos años trabajando con MSF se empieza a recibir un salario.
Es importante saber que el espíritu y la filosofía de la organización están basados en un trabajo voluntario y de tipo humanitario, MSF tiene uno de los salarios más bajos comparados con las otras ONG humanitarias y por supuesto mucho menor comparado con el sistema de salarios de Naciones Unidas, en resumen la gente que trabaja con nosotros no lo hace por el salario sino por una vocación.
¿De qué naciones son los médicos que trabajan hoy atendiendo el Ébola en África?
Por el tema del idioma necesitamos gente que hable francés e inglés por eso hay mucha gente de habla francesa; mucho francés, mucho belga, la mayoría en este momento son europeos y por supuesto africanos, gente del Congo, de la misma Guinea, de Senegal porque muchos de ellos tienen experiencia ya con Ébola. Pero a lo largo de nuestra historia hemos contado con personal de todo el mundo.
¿Cómo es la experiencia de un médico sin fronteras cuando se está inmerso en una comunidad afectada por una epidemia de esta magnitud?
La verdad es que la sensación general no es de miedo ya que MSF tiene ya bastante experiencia y no es la primera vez que atiende este tipo de brotes; hay protocolos realmente muy buenos, MSF se preocupa mucho por proteger a su personal, inclusive los trajes y toda la indumentaria que usamos es más segura de la que sugieren los protocolos de la OMS, es decir vamos un poco más allá y queremos estar absolutamente protegidos de todo.
Sí hay una especie de tensión naturalmente, pero la verdad lo más complicado es cuando tienes al paciente al frente, porque te ve como un astronauta, donde el contacto natural que tienes con la persona, que es parte de la experiencia médica el hecho de tocarlo de examinarlo, ese contacto se pierde porque tienes tres guantes encima de ti, y toda la indumentaria te hace sentir súper aislado.
Muchos pacientes te piden que los abraces porque lo necesitan. Hay un momento que es muy bonito y es cuando aquellas personas que logran sobrevivir y que son dados de alta en el centro de Ébola, tanto la enfermera que lo atendió como el médico y el mismo paciente quieren ir a abrazarse y finalmente sentir un contacto directo.
En África las muertes ya superan las 4000, cómo vive esta situación tan dura un MSF, el ver morir tanta gente y no poder hacer mucho por eso.
Es terrible, yo estuve en el brote más grande de la historia de Cólera en Haití que es donde he visto más fallecidos en mi vida en un periodo corto de tiempo y es terrible ver que la gente fallece delante de tus ojos y a veces no puedes hacer mucho por ellos. Sobre todo en esta epidemia en donde no hay tratamiento, tu intervención se limita a darle al paciente cuidados paliativos y un tratamiento digno.
También es un momento muy crítico para otro tipo de colaboradores además de los médicos que no son los únicos que tienen el riesgo de contagio, la segunda población con más riesgo es la gente que maneja los cadáveres, porque el cadáver recién fallecido es muy infeccioso, entonces estas personas tienen que estar igual de protegidas que el médico que atiende los pacientes.
Hay algo que ha sido terrible ante la gran cantidad de cadáveres que había acumulados en hospitales y en las calles de los que nadie quería hacerse cargo, MSF se ha visto obligado a hacer algo que nunca en sus 42 años de historia había hecho y es tener que construir crematorios. Eso es muy complicado porque según las prácticas culturales africanas los cuerpos no se creman, sino que se les da un entierro de acuerdo a sus creencias, entonces tienes que hacer algo que va en contra de la cultura y puedes tener problemas con la población por esto.
Según la experiencia de MSF, qué ha hecho que este brote de Ébola no se haya podido controlar como los anteriores, pues la enfermedad apareció en el 76 y nunca antes se vivió la crisis que vive el mundo hoy.
MSF ha trabajado con este brote desde Marzo de este año cuando atendimos el primer llamado, y desde ese momento hemos venido alertando sobre el potencial que tenía esta hemorragia atípica y que se podría expandir rápidamente. Lamentablemente esos llamados iniciales no tuvieron eco y tanto las autoridades sanitarias como la OMS que es la organización que coordina y brinda la asistencia a estos países, no supieron responder rápidamente.
Recién en Agosto, la OMS declara la enfermedad como una epidemia de salud pública de carácter internacional. Entonces no sé si no supieron leer lo mismo que nosotros o no quisieron responder a tiempo, no lo sé, pero lo más importante es que hubo una respuesta tardía.
Otra razón importante es que es una enfermedad que aparece nueva en una población, esto hace que se desarrolle mucho miedo, que la gente no quiera ir a los centros de salud y por lo tanto se expanda rápidamente y por último el hecho que por primera vez haya llegado a la zona urbana.
¿Por qué es más difícil controlar la enfermedad en las ciudades?
Porque en las zonas rurales, hay mucha menos población y es más fácil hacer el seguimiento de los contactos que tuvo la persona afectada. Si alguien cae enfermo y se le diagnostica Ébola una de las primeras medidas que hay que tomar para poder contener el brote es preguntar con quién se tuvo contacto cuando se estaba enfermo. Por eso cuando uno ve los casos nativos en USA y en España todos son de personal de salud porque ellos son los primeros que tienen contacto y por lo tanto riesgo de contagiarse.
Entonces en esas zonas en las que hay menos población, y menos movimiento de esa población es más fácil que se pueda hacer un buen rastreo de los contactos que se tuvo. Cuando estás en una ciudad densa y donde la gente, sale a la calle, va al mercado y regresa, luego va de visita y pasa tiempo en zonas públicas, entonces los contactos no son ya 3 o 4 sino fácilmente 40 y no sabes quienes exactamente, eso hace mucho más difícil poder controlar el contagio del virus. Aunque se puede hacer, en Nigeria y Senegal ha habido casos y ellos lograron controlarlo hubo solo 20.
¿Y cómo lo lograron?
Necesitas tener una movilización inmensa de personal explicándole bien a la población qué es la enfermedad, la importancia que tiene. Además un compromiso político serio, armar un grupo de trabajo entre autoridades, organismos internacionales, ONGs y que puedan todos trabajar del mismo lado.
En Nigeria por ejemplo tenían acceso a los celulares de cada persona entonces pudieron rastrear rápidamente a todos los contactos que los pacientes infectados hubieran tenido, una vez identificados esos contactos el personal médico iba y hacía un monitoreo diario, tomaban temperatura, pruebas de sangre en fin. Ese es un ejemplo bastante bueno de cómo se puede contener la enfermedad y que con ese compromiso se puede lograr.
¿Qué medidas han tomado la ONU y la OMS en las regiones afectadas?
Se ha instalado lo que se llama la UNMER que es la misión de las Naciones Unidas para la respuesta de Ébola que tiene su base en Ganha y desde allí está coordinando todo y la OMS está dando apoyo técnico abierto en los centros de aislamiento también. Lamentablemente está respuesta y esta movilización debió haber pasado hace 5 meses y no ahora donde ya estalló todo y es mucho más difícil manejarlo.
¿Hay presencia de MSF en otros países? Por ejemplo en Sur América.
No. MSF está realmente concentrado en el epicentro de la enfermedad no tenemos presencia en países que no estén cercanos de la región afectada. La OMS que es el asesor técnico ante los gobiernos y los países muy seguramente está trabajando en Colombia, en Perú, en Chile junto con los ministerios de salud en tratar de tener planes de contingencia y protocolos en caso de que se confirme un afectado.
¿Cuáles, según la experiencia de MSF, son esas medidas de contingencia que deben tener en cuenta los gobiernos?
Lo primero que hay que entender es que en este momento la epidemia sigue concentrada en tres países; Guinea, Liberia y Sierra Leona. Cualquier otro caso en otro país es realmente aislado y todos tienen el antecedente de haber estado allá, entonces si no vienes de esos tres países la verdad es muy poca la posibilidad de estar infectado.
Por ejemplo con el caso colombiano, y el de Perú que generaron alarma por llegar de Guinea, pero hay cuatro Guineas en el mundo; Guinea Bissau, Guinea Ecuatorial a 2000km del epicentro de la enfermedad, Papúa Nueva Guinea y Guinea Conakry que es donde está presente la epidemia, y resulta que estos casos venían de Guinea Ecuatorial y con eso prácticamente se descarta que sea Ébola. Esa pregunta es fundamental.
Lo segundo que hay que hacer es identificar un plan de cómo se va a hacer el seguimiento epidemiológico, la vigilancia epidemiológica, el rastreo de los contactos. Por ejemplo al personal internacional que ha regresado a sus países de origen después de estar en una zona afectada por la enfermedad se le pide que por un periodo de 3 semanas no viaje y que además se mantenga en un lugar que esté a menos de media hora de un centro hospitalario que tenga la capacidad de atender a un paciente potencialmente con Ébola. Por eso es importante identificar en los países cuáles son estos centros de salud capacitados.
También es necesario capacitar al personal de salud, médicos o enfermeras y autoridades de salud, porque la experiencia también tiene mucho que ver en el manejo de esto. Tienen que saber cómo se transmite y como no se transmite la enfermedad para que hagan las preguntas correctas, cuáles son los trajes apropiados para atender un posible contagiado y conocer todos los protocolos con los que se lleva a cabo cada procedimiento.
Esas creo yo que son las medidas más importantes, medidas como negarle el visado a los extranjeros que vienen de estos países no me parece lo más efectivo, primero porque siempre existe la migración ilegal, el caso en Perú era de un pescador ilegal que llegó al país; segundo porque las personas que tienen mayor riesgo son personal de salud o trabajadores que están allá en otras labores y van a poder ingresar al país y desarrollar síntomas. Por eso creo que esta medida no va a tener efecto.
¿Por qué el periodo de tres semanas?
Si después de tres semanas no se desarrollan síntomas, no hay Ébola porque este, que es el periodo de incubación del virus, va entre 2 y 21 días. Si yo estoy trabajando en alguno de estos países que tiene la epidemia y tomo mi avión de regreso el 1 de noviembre y el 21 aún no estoy enfermo, no hay riesgo de que tenga Ébola.
¿Se calcula en cuanto tiempo se va a controlar la epidemia?
No. En este momento se puede asegurar que en África la epidemia está fuera de control, lo único que se espera es que los casos y las muertes sigan aumentado en los próximos dos meses.
No se puede saber con exactitud hacía donde va a ir, cuando se va a contener porque la respuesta médica que se tiene que dar para controlar la epidemia es muy limitada por parte de MSF, a pesar de ser casi 300 personas las que están trabajando para la organización en seis proyectos repartidos en las regiones más afectadas; dos en Siberia, dos en Sierra Leona y dos en Guinea.
Esta, de hecho es comparable con la respuesta que tuvimos en el tsunami de Indonesia, con la misión en República democrática del Congo, con la respuesta en el terremoto de Haití. Es realmente grande y eso hace que nuestro personal ya esté llegando al límite de sus capacidades y a un cansancio natural de nuestros equipos.
Hasta que no haya más presencia médica, más centros de aislamiento, en general más presencia en el terreno para hacer educación comunitaria o laboratorios móviles para tomar muestras de sangre a la población es imposible saber cómo se va a comportar la epidemia. Mañana puede aparecer en Guinea Bissau o en Mali. Es completamente impredecible.