No puede comer en las calles en Roma

Los turistas y transeúntes que aprovechan para comer mientras recorren la calles del centro histórico de Roma, no podrán hacerlo más. Desde el 4 de octubre hasta el 31 de diciembre estará prohibido utilizar las escalinatas de plazas, calles y monumentos como comederos.

El alcalde Gianni Alemanno del partido de Silvio Berlusconi (PDL), decreto aplicar una multa de entre 25 y 500 euros a quienes consuman alimentos en las zonas turísticas. Sin embargo no se ha estipulado si la suma sube o baja dependiendo del lugar o del alimento que se este consumiendo.

La llamada “ley antipanino” prohíbe “beber y comer así como cualquier forma que implique acampar” junto a los monumentos arquitectónicos del centro histórico de Roma. Esta ley pretende hacer respetar no solo a los romanos sino a los turistas, para el Alcalde esto significa “la norma más elemental del decoro humano”.

Las personas que sean multadas, tendrán derecho de leer el boletín de infracción y saber la justificación de por qué tendrá que pagar 25 0 500 euros dado el caso.

Así como se espera que esta ley se cumpla en pro de la ciudad y sus habitantes, hay otras que buscan recuperar las calles y plazas que son invadidas por las “mesas salvajes” como se le denomina al fenómeno de la invasión de espacios peatonales por parte de los restaurantes.