Desconocer la crisis del sistema y mantener la insuficiencia en el personal de salud son otras problemáticas que plantea la más reciente Política de Atención Integral en Salud (PAIS).
En tales condiciones, esta nueva política podría representar un retroceso en el sistema, señalaron expertos invitados al debate que sobre el tema se llevó a cabo en la Universidad Nacional de Colombia.
Según Jaime Hernán Urrego, candidato a doctor en Salud Pública de la U.N., la política de atención integral planteada por el Ministerio del ramo, luego del debate que se dio sobre la crisis que afronta el país en este sector, “tiene inconvenientes que deben resolverse, como que las EPS no se centran en los resultados en salud, sino en la gestión del riesgo financiero”.
También se evidencia que en el planteamiento de la política persiste la inequidad entre lo rural y lo urbano, en tanto no se da la atención necesaria a los grupos étnicos ni a las regiones apartadas.
La doctora Luz Mery Mejía de la Universidad de Antioquia, una de las panelistas invitadas, destacó que si bien celebran que por primera vez, desde la creación del Sistema General de Seguridad Social en 1987, el Ministerio esté hablando de un nuevo modelo de atención, aún hay dudas sobre cómo se va a llevar a cabo.
“En los documentos y presentaciones que se han dado a conocer no se reconoce la crisis del sistema y se plantea la política como puente entre el Sistema General de Seguridad Social y el sistema de salud”, añadió.
La experta señaló que la responsabilidad caerá principalmente en manos de los prestadores de salud, desconociendo la crisis actual de la red hospitalaria pública y privada, la situación de liquidez y las carteras morosas de las EPS.
“No se plantean estrategias para resolver estas problemáticas y es vital que las redes estén activas para asegurar una mejor atención a los pacientes. El documento de esta política tiene una limitada comprensión de los determinantes sociales de la salud”, sostuvo.
En cuanto al personal de salud, en la PAIS reconocen que tienen derechos y que es necesario mejorar sus condiciones laborales, pero no hay una propuesta estructurada por parte del Estado.
Actualmente se presenta insuficiencia de personal en áreas estratégicas, sumado a una distribución inadecuada y condiciones laborales precarias.
La panelista señaló, igualmente, que se debe buscar un sistema concentrado en el derecho a la salud y no a la rentabilidad financiera.
La hermana María Inés Delgado, directora de la Asociación Colombiana de Enfermos Hepáticos y Renales, dio su punto de vista desde los pacientes. “Nos falta humanizar el sistema, el paciente está diluido dentro de todas las políticas, es un elemento más en el sistema y debería ser el centro. Una política de salud que no cuente con esto no está dando repuestas a las necesidades de las personas”, señaló la religiosa Delgado.
Agregó que lo que plantea el Gobierno en la PAIS es una respuesta teórica a la que le falta realismo y centrarse en problemas estructurales que deben cambiar.
En el sistema actual, las personas encuentran constantemente muchas barreras de acceso. Por ejemplo, se han registrado casos en los que se debe esperar hasta tres meses para acceder a una cita con un médico general, pese a que a este servicio se debería ofrecer en menos de 24 horas.
Para médicos especialistas la asignación de citas puede tardar hasta año y medio, y para pruebas diagnósticas especializadas, hasta dos años.
“Toda esta situación se agrava porque muchas veces las EPS tienen convenios con instituciones para realizar ciertos procedimientos o dicen que no hay agenda. Constantemente les niegan los servicios a las personas”, puntualizó la hermana Delgado.
Por último, señaló que uno de los problemas más grandes es que las EPS siguen teniendo el factor dominante sobre los demás entes del sistema. “A las EPS solo les interesa el lucro y mientras no se cambie esto no es posible una verdadera trasformación del sistema de salud”, concluyó.